El etiquetado Nutri-Score es un modelo de etiquetado frontal voluntario que promueve el Ministerio de Consumo y que cuenta con el apoyo de sociedades científicas nacionales y de las principales asociaciones de consumidores, tanto a nivel europeo como nacional. Pero hay asociaciones científicas que han iniciado la batalla contra este modelo, como es la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (FESNAD), una de las más activas en su posición en contra.
Aunque detrás de esta confrontación hay polémica. En primer lugar, FESNAD distribuye a bombo y platillo un comunicado contra Nutri-Score sin mencionar que hay tres sociedades que la integran que no han querido firmar ese documento. Se trata de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) y la Asociación de Licenciados en Ciencia y Tecnología de los Alimentos (ALCYTA).
Lo que corrobora que ese posicionamiento de FESNAD no corresponde al conjunto de sociedades que la conforman bastan con ir al documento original, disponible en la web, pero no mencionado ni en las notas de prensa ni en la comparecencia pública que se realizó en formato webinar.Además, la Dra. Ascensión Marcos se ha presentado como portavoz líder de este movimiento, en su carácter de presidenta de FESNAD, tal como consta en la firma del documento. Sin embargo, la Dra. Marcos ya no es presidenta de FESNAD. Sí lo fue anteriormente, pero ya no ejerce ese cargo.
Desde FESNAD, tras contactar este periódico para pedir explicaciones al respecto, relatan que el documento está firmado por las sociedades que aparecen en él y las que no aparecen es porque no lo firman, todo ello "dentro de la pluralidad de opiniones normal en una federación pluridisciplinar". Sobre la firma de la expresidenta recalcan que el documento se realizó cuando la Dra. Ascensión Marcos todavía cumplía con la función de presidenta y que ahora es miembro de la federación en representación de SEÑ.
Estas conjeturas manchan este debate en contra de este sistema de etiquetado que se ha presentado como una herramienta clave para ayudar a los consumidores a tomar decisiones más informadas y saludables sobre los alimentos que compran y consumen.
El sistema Nutri-Score, que ya se usa en países europeos como Francia y Bélgica, se focaliza en la cantidad de calorías, azúcares, sodio y grasas saturadas que tienen los alimentos por 100 gramos o mililitros y, mediante un algoritmo, se atribuyen los puntos positivos o negativos en relación con la cantidad de los constituyentes. Así, se muestra un gráfico, a modo de semáforo, de cinco colores y cinco letras (del rojo al verde y de la A a la E).
