Después de las últimas jornadas con temperaturas más veraniegas que lo propio del mes de marzo, los meteorólogos han advertido la llegada de una DANA (depresión aislada en niveles altos) que traerá el cambio de tiempo definitivo este miércoles a la primavera recién estrenada. El fenómeno, que especialmente afectará al norte peninsular, vendrá acompañado de lo que se conocen como “lluvias de sangre”, debido a la combinación de precipitaciones y calima en el aire. Las comunidades de Cantabria, La Rioja, Castilla y León y País Vasco tienen avisos amarillos por tormentas que comenzarán a las 16:00 horas y durarán toda la tarde, según pronostica la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

Para las primeras horas de la DANA se espera que las precipitaciones abunden en el tercio norte de la península y que se irán extendiendo hacia el sur según avance este miércoles. En varias regiones del norte habrá también una tormenta eléctrica que acabará llegando a Madrid. Por otra parte, en el sudeste de la península los expertos esperan una mayor intensidad de las lluvias de barro. Todo ello estará acompañado de un ligero descenso en las temperaturas que acabará con la sensación térmica tan “veraniega” que ha caracterizado los últimos días. Roberto Brasero ha señalado que las tormentas provocadas por la DANA  "ponen muy difícil el mirar hacia el futuro con cierta confianza en el pronóstico", lo que hace que peligre el buen tiempo durante esta próxima Semana Santa.

Se esperan “lluvias de sangre” en la península

El viento proveniente del sur llegará en esta jornada cargo de polvo en suspensión, lo que provocará calima en la península y Baleares, acompañada de lluvias de barro, algo que se conoce como “lluvias de sangre”. Este fenómeno podría llegar al territorio peninsular junto con granizadas y reventones en algunas zonas. Aún así, los expertos señalan que estos chubascos no llegarán a ser muy intensos, ya que “en capas medias-bajas no serán del todo favorables” para estos.

A partir de este próximo jueves, la primera DANA de la estación  irá desplazándose hacia el sur, sobre todo hacia las Islas Canarias, aunque podrá seguir provocando chubascos espontáneos en la península y Baleares, que serán menos probables según el fenómeno avance hacia el oeste.

El tiempo de cara al fin de semana

Según la AEMET, este próximo viernes se presentará más estable que los días anteriores, bajo un ambiente cálido en la mitad sur de la península con temperaturas de hasta 30 grados en ciudades como Almería, Badajoz, Córdoba, Granada o Sevilla. También en el interior de España se alcanzarán los 25 grados, y en la costa mediterránea habrá entre 20 y 25.

Sin embargo, el sábado y el domingo, el paso de un frente dejará lluvia especialmente en la mitad norte del país, dónde también los expertos prevén una considerable bajada de las temperaturas que se normalizarán en algunos puntos y podrían provocar heladas en zonas de montaña. Por otra parte, en Canarias habrá abundantes precipitaciones durante el viernes y el sábado. Los expertos señalan que se pueden esperar nevadas en las cumbres más altas de Tenerife y La Palma, en los picos que estén por encima de los 2.000 metros.

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