Ha pasado casi un mes después de inyectarse en España la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus y ya se comienzan a analizar algunas irregularidades que deja a la vista la campaña. Según el registro del Ministerio de Sanidad en España, ya se han inyectado más de un millón y medio de dosis. El ritmo de la vacunación no es el esperado y debería, cuanto antes, multiplicarse por 6, del contrario el objetivo del 70% de vacunados no llegaría hasta mayo del 2025. Los retrasos en el suministro de dosis anunciados por las farmacéuticas Pfizer y AstraZeneca son otro de los factores que complican la campaña de vacunación del coronavirus.

La demora altera los planes y el ritmo y en algunas comunidades se han aplazado las vacunas de sanitarios por falta de suministro. En España comenzó a aplicarse la segunda dosis el pasado domingo, tres semanas después de la primera, aunque de momento solo el 0,15% de la población ha recibido la inmunización completa.

El mayor escándalo sobre las vacunaciones irregulares se ha dado al salir a la luz que cientos de políticos, cargos públicos, militares, funcionarios o incluso extrabajadores de hospitales han recibido la vacuna sin ser de los grupos prioritarios. Se estipula que la primera tanda es únicamente para ancianos en residencias, sus cuidadores y sanitarios en primera línea. Destaca la polémica del Hospital Clínico San Carlos de Madrid que infringió el protocolo y vacunó a sanitarios jubilados alegando que se usaban dosis que habían sobrado. Así mismo, destaca el escándalo del consejero de Salud de Murcia, Manuel Villegas, que ha presentado su dimisión al haber recibido la vacuna en contra del protocolo.