Jonathan Andic se considera en estos momentos el principal sospechoso de la muerte de su padre y fundador de la firma de moda Mango, Isak Andic. Así lo dictamina la juez que investiga el caso y los Mossos d’Esquadra, quienes tildan de posible homicidio el fallecimiento del empresario.

Según recogió este jueves El País, el heredero del imperio Mango se considera como principal sospechoso de la muerte al haber sido el único testigo del presunto accidente de montaña que le causó la muerte a Andic. Los agentes reabrieron la causa después de haber estudiado las incongruencias en el relato del hijo.

De esta manera, la magistrada y titular del Juzgado de instrucción 5 de Martorell (Barcelona) que investiga el caso mantiene la causa en secreto, atribuyendo la condición de investigado a Jonathan Andic. Según los portavoces de la familia, “no harán comentarios”, tal y como recogió el medio citado, pero a su vez mostraron su “respeto” al proceso judicial abierto “y seguirán colaborando, como hasta ahora, con las autoridades competentes”. Así las cosas, han confiado en que se mostrará “la inocencia” del hijo del fallecido.

Por su parte, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha apuntado que, en términos procesales, la causa en este punto “no se ha dirigido ni se dirige contra ninguna persona concreta”. Dicho en otras palabras, que el primogénito del fundador de Mango no está, en estos momentos, imputado.

Cronología de los hechos y muerte de Isak Andic

Fue el 14 de diciembre de 2024 cuando padre e hijo emprendieron una ruta de senderismo en Montserrat. En la recta final, en el descenso hacia el aparcamiento, Isak, de 71 años, cayó en un punto que bordeaba de un precipicio hasta 150 metros, muriendo en el acto. Según el relato de su hijo, éste no escuchó nada porque iba delante de su padre al hacer la ruta.

Inmediatamente, los Mossos investigaron los hechos y, un mes después del trágico accidente, el juzgado de Martorell archivó el caso. No obstante, los agentes de Cataluña continuaron investigando la causa porque el relato del primogénito no les encajaba del todo, pidiendo así la reapertura del caso en sede judicial y volviendo a llamar a Andic hijo a que prestase declaración, a quien ahora investigan por presunto homicidio.

No obstante, hasta la fecha, los Mossos no cuentan con pruebas evidentes de que la muerte tuviera un móvil y no fuera un accidente, más allá de haber percatado contradicciones o incoherencias en la versión del principal sospechoso y único presente en el lugar de los hechos. Por ello, pidieron el volcado del teléfono del investigado, el cual se entregó el 9 de septiembre, en aras de analizar cualquier indicio.

Cabe recordar que, en el ámbito empresarial, la tensión entre padre e hijo en la última etapa aumentó puesto que el dueño de Mango, días antes de su fatídica muerte, en la fiesta de navidad de la empresa, anunció que pasaba el mando de esta al CEO, en vez de a su hijo.

Síguenos en Google Discover y no te pierdas las noticias, vídeos y artículos más interesantes

Síguenos en Google Discover