El 3 de agosto se celebra el Día Internacional de la Planificación Familiar, un tema relacionado con el control de la natalidad en la población sexualmente activa mediante el uso de métodos anticonceptivos, de acuerdo al número de hijos que cada persona quiere tener y las circunstancias personales, económicas y sociales.

Este derecho constituye una herramienta clave para el derecho que tienen las personas a las salud sexual y reproductiva. La Organización Mundial de la Salud (OMS) propuso el 3 de agosto para celebrarlo.

 Así se dirige a evaluar los diferentes métodos anticonceptivos para la prevenir embarazos no deseados, pero además infecciones de transmisión sexual, salud sexual, asesoramientos antes de una concepción, entre otros.  

La OMS considera que garantizar que todas las personas puedan optar a sus métodos anticonceptivos preferidos, refuerzan varios derechos humanos, como el derecho a la vida y a la libertad; la libertad de opinión y expresión, y el derecho al trabajo y a la educación. Asimismo, genera beneficios para la salud.

Cifras mundiales

La OMS calcula que en 2019 había 1.900 millones de mujeres en edad reproductiva (entre 15 y 49 años) en el mundo, de las cuales 1.112 millones precisan planificación familiar. De esta cantidad, 842 millones utilizan métodos anticonceptivos y 270 millones tienen necesidades desatendidas en materia de anticoncepción.

Métodos anticonceptivos

El preservativo es el único método que evita tanto el embarazo como las infecciones por transmisión sexual, como el VIH. Este elemento fomenta el derecho que tienen las personas para decidir el número de hijos que quieren tener.