"Un espíritu indomable, una personalidad arrolladora, una mujer fuerte y valiente que luchó contra todas las adversidades más allá de lo imaginable". Veintidós palabras han servido a Alejandro Sancho, hijo de María Jiménez, para definir a su madre tras su fallecimiento este jueves en su Triana natal, Sevilla, a los 73 años.

Una de sus últimas acciones antes de morir fue la creación en el año 2022 de la Fundación María Jiménez, destinada a la lucha contra la violencia de género a raíz de su propia experiencia personal; con el objetivo de ser un espacio de refugio para las mujeres víctimas de malos tratos.

Y es que la artista vivió un infierno durante su relación con el actor Pepe Sancho. Fuera el foco mediático que supuso la pareja durante los años 80, la realidad cuando no había cámaras eran las palizas. Ambos se conocieron una noche en Madrid. Ella tenía 30 años y era madre soltera de una hija, Rocío. "Fue un flechazo, pero después fueron veinte puñaladas", ha legado a confesar la sevillana en algunas entrevistas en las que hablaba de sus años de relación con el actor.

La tormentosa relación de María Jiménez y Pepe Sancho y el fallecimiento de su hija Rocío

Tal fue el enamoramiento que a los pocos meses fue ella la que pidió matrimonio al actor. Lo hizo como ella solo sabía ser, siendo icónica, sobre el escenario del madrileño Florida Park durante un ensayo. "Creo que, por entonces, yo no estaba enamorado, porque seis meses después supe que lo estaba”, indicaba unos años después él. El 1 de junio de 1980 se casaron en Sevilla. La primera de sus tres bodas. 

Tres años después, en 1983, nació el hijo fruto del matrimonio, Alejandro. Un momento que se resolvió con el divorcio de la pareja a los pocos meses. Poco después, su hija María del Rocío murió a los 16 años en un accidente de tráfico. Comenzó así uno de los peores momentos personales de María Jiménez. Decidió apartarse de su vida pública y centrarse en la educación de su hijo.

Fruto de ese mal momento volvió a unirse a Pepe Sancho. De hecho, se convirtió en su gran apoyo. Un tiempo después volvieron a celebrar su segunda boda. Esta vez fue en 1987, en Costa Rica. Un evento que propició que pudiera rodar la película El Dorado en el país caribeño.

Sin embargo, la situación no mejoró. Los malos tratos, las peleas y los celos se apoderaron de la pareja. Un tiempo después volvieron con una mediática boda en Nepal. Sin embargo, fue un montaje para poder realizar una exclusiva en una revista.

Tras 22 años juntos, la artista rompió de manera definitiva con Pepe Sancho en el año 2002. Su hijo Alejandro descubrió una infidelidad de su padre y se lo contó a su madre.

En aquel momento, la artista se puso el mundo por montera por enésima vez en su vida y relanzó su carrera musical con un clásico gracias a La cabra mecánica. La lista de la compra se convirtió en un clásico instantáneo y su nuevo disco Con dos camas vacías, versionando canciones de Sabina a las que dio una nueva dimensión relanzó su música. 

El maltrato de Pepe Sancho

Su empoderamiento durante aquella época le dio las fuerzas para hablar, como ella solo sabía hacerlo, de los malos tratos que recibió de Pepe Sancho. "Ese señor me maltrataba física y psicológicamente. Me daba una paliza y me decía: vamos a casarnos otra vez. Y yo como una tonta, después de dos carantoñas, le creía", llegaba a confesar hace unos meses en un especial Lazos de sangre dedicado a ella. De hecho, en su biografía Calla Canalla, la artista contaba con pelos y señales varios de estos momentos. "En mi época eso no se podía denunciar. Si llega a pasar hoy, lo meto en la cárcel veinte años. Y encantada lo habría hecho", aseguraba en el programa de TVE.

Una vida dedicada al arte

María Jiménez nació en el barrio sevillano de Triana el 3 de febrero de 1950. Abandonó su trabajo como limpiadora para comenzar a bailar en los tablaos de la capital hispalense con tan sólo 15 años de edad. A partir de entonces, su ascenso fue meteórico, hasta consolidarse como una de las artistas más completas y reconocidas del panorama nacional. La artista ha dedicado casi medio siglo de su vida a la carrera musical y cuenta en su haber con 18 álbumes, además de hacer sus pinitos en la pequeña y gran pantalla, desatando todas sus dotes actorales en películas y series de televisión.

La intérprete cuenta entre sus reconocimientos con una Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en el año 2022, concedida por el Ministerio de Cultura, y también la Medalla de la Ciudad de Sevilla. Además, fue condecorada con la insignia de Oro de Chiclana, el Premio Andalucía Excelente o la distinción en los premios Radiolé. En 1976 publicó su primer disco, tocando una gran variedad de palos como la rumba, tangos, bulerías, boleros, rancheras y baladas de Silvio Rodríguez, Lolita de la Colina y Amancio Prada.

Dos años después, en 1978, Jiménez lanzó Se acabó, cuyo primer sencillo fue todo un éxito tanto en España, pero también en México. Una letra desenfadada sobre una mujer harta de una situación de maltrato. En los años ochenta continuó ensanchando su obra musical, grabando y lanzando más álbumes. En 2001 colaboró en la canción La lista de la compra, con el grupo La Cabra Mecánica. La colaboración elevó al tema a lo más de la lista de los 40 Principales. En 2002 lanzaba el disco Donde más duele (Canta por Sabina), un recopilatorio que versiona las mejores canciones del cantautor de Úbeda. Por último, en 2020, lanzó su último trabajo, con colaboraciones de Pitingo y Miguel Poveda, entre otros. Doce canciones que componen el álbum La vida a mi manera.

María Jiménez hace su primera incursión como actriz en la película Manuela (1976), en el que hizo un pequeño papel, además de participar también en la composición de la banda sonora con Gonzalo García-Pelayo. Precisamente éste fue el encargado de producir el primer disco de la intérprete, donde se recopila el emblemático tema Se acabó, pero también incluyó los no menos míticos Háblame en la cama o Con golpes de pecho; este último, una ranchera que la artista convirtió en un hit en nuestro país al utilizar un estilo más flamenco, abriéndole camino a su época dorada.

Sus apariciones en la gran pantalla, además de la mencionada Manuela, continuaron con Perdóname, amor (1982), ¡Ja me maten! (2000), Yo puta (2004) o Los managers, entre otros filmes. No obstante, también hizo sus colaboraciones con la pequeña pantalla, como por ejemplo, en series de éxito de la década de los 90 como Hostal Royal Manzanares (1996), protagonizada por Lina Morgan, o Todos los hombres sois iguales (1997), además de ejercer como presentadora del espacio de Canal Sur Bienaventurados en 2006 y de jurado en Se llama copla, también emitido en la televisión pública andaluza.

Alejada de la música tras un último disco tras sufrir un coma publicado en 2020 de la mano de Miguel Poveda, María Jiménez fundó en el año 2022 la Fundación María Jiménez, destinada a la lucha contra la violencia machista a raíz de su propia experiencia personal; con el objetivo de ser un espacio de refugio para las mujeres víctimas de malos tratos.