Los doctores operaron al pequeño durante cinco horas para reparar los tejidos afectados. Sin embargo, aunque se anunció una leve mejoría durante los diez días en los que estuvo ingresado en estado crítico en el Hospital Infantil Regional de Dnipro, conectado a un ventilador y en diálisis renal, Yegor, de dos años, ha terminado falleciendo.

El suceso ha tenido lugar en la pequeña ciudad de Selydove, en el este de Ucrania. Según el informe policial, el pequeño salió a jugar sin ser visto mientras sus padres, que se quedaban hablando con otros familiares que habían acudido para celebrar el segundo aniversario del nacimiento de Yegor. Al parecer, el padre no habría cerrado correctamente el recinto en el que debían permanecer los dos pastores alemanes de la familia, por lo que las autoridades han acusado al progenitor de incumplir los deberes paternos, lo que abre un proceso penal que podría llevar a prisión al desconsolado padre durante tres años. 

Pese a ser trasladado al hospital de urgencia y en helicóptero, no se logró evitar que la fiesta de cumpleaños de Yegor terminase convirtiéndose en el día que terminó provocando su dramática muerte.