José Luis Jiménez, experto español y químico de la Universidad de Colorado, ha concedido una entrevista a El País en la que ha aludido a las medidas aplicadas para frenar los contagios de coronavirus, entre ellas destaca el peligro de los espacios cerrados, en los que es más probable la transmisión del virus.

El profesor, autor de un estudio sobre este tema, lleva meses destacando la importancia de que los ciudadanos hagan vida en el exterior y eviten el interior de bares y restaurantes. 

La controversia proviene de unas palabras pronunciadas por la propia Organización Mundial de la Salud (OMS) al respecto hace unos meses atrás, la cual no reconocía por aquel entonces que el virus se contagiase por el aire, como ya confirmaban expertos como Jiménez. Ya entrados en julio, la OMS rectificó mediante un documento en el que se especificaba las vías y modos por los que el coronavirus podía transmitirse, en el cual incluyeron los aerosoles, unas pequeñas partículas que contienen carga vírica, pudiéndose mantener durante varios minutos en el aire.

A raíz de ello, en la entrevista al diario español, el experto explica mediante un ejemplo cómo se produce la transmisión en espacios de interior: “La idea más sencilla es pensar que todo el mundo está exhalando humo”. Así, el experto relata que el "humo" se va acumulando en dicho espacio, dado que no hay ninguna posibilidad de ventilación, facilitando así el contagio, dado que todos los presentes en la sala respiran el mismo "humo". 

“Lo inhalamos y se queda en algún punto de nuestro sistema respiratorio. La evidencia es abrumadora”, ha señalado. Semanas atrás, él mismo volvió a incidir en las seis medidas fundamentales para evitar el contagio: respetar la distancia, no estar mucho tiempo, intentar no estar con mucha gente, ventilar bien, llevar mascarilla bien ajustada y evitar, sobre todo, cantar y gritar. 

Una "manía" que se suele tener en los espacios cerrados, cuando la gente se reune con familiares, amigos o contactos estrechos, es quitarse la mascarilla, algo que Jiménez califica como "desastre", especialmente cuando se hace con el mero fin de "hablar mejor" o incluso gritar: “Al hablar y sobre todo al gritar salen entre 10 y 50 veces más partículas potencialmente infecciosas”.

Como novedad, en esta última entrevista, se ha centrado también en el papel que tienen los políticos en este tema, avisando de que deberían centrar toda su atención en controlar los aforos en los espacios de interior, ya que “ahí es dónde se están produciendo la gran mayoría de los contagios y ahí es donde se deberían limitar más las actividades y ventilar mejor, todo lo que se pudiera”. 

El experto ya explicó esta teoría en 'Antena 3 Noticias' , asegurando que los rastreos de los contactos evidencia que "es 20 veces más probable contagiarse en el interior”.