El 11,2 % de los trabajadores en España está en riesgo elevado de sufrir acoso laboral, mientras que el 18,8 % afronta un riesgo medio. El 70% restante presenta riesgo bajo. Son los resultados del estudio del Observatorio Social de la Fundación "la Caixa” Detección del acoso psicológico en el trabajo y su impacto negativo en el bienestar psicológico, a cargo del Grupo de Investigación Cármides, integrado en las universidades de Málaga y Sevilla, y liderado por el investigador José María León-Pérez.
El acoso psicológico es uno de los principales riesgos psicosociales para la salud de los trabajadores. Sin embargo, los métodos empleados para su detección son puestos en tela de juicio por utilizar criterios subjetivos que pueden falsear involuntariamente la realidad. Por ello, los investigadores y expertos en el tema han realizado numerosos esfuerzos para ofrecer criterios más objetivos que permitan discernir con mayor precisión si una persona está expuesta a una situación de acoso en su puesto de trabajo.
Los investigadores han partido de una muestra representativa a escala nacional de 5.000 personas y han analizado la probabilidad de sufrir acoso en el contexto laboral sin analizar específicamente su procedencia, es decir, solo han medido el riesgo -alto, medio o bajo-, sien entrar en si el hostigamiento es vertical descendiente o entre iguales.
El acoso laboral puede tener consecuencias muy negativas para las personas que lo sufren. Es 11,2% de trabajadores con mayor riesgo multiplican casi por cinco las probabilidades de desarrollar un trastorno de ansiedad generalizada. Dentro de estre grupo, los investigadores observaron que un 19,9% de los casos presentaban síntomas de ansiedad frente al 7,4% y 5,3% que registraron los grupos de riesgo medio y riesgo bajo.
¿Qué se entiende por acoso laboral?
Los investigadores han considerado como acoso laboral una serie de comportamientos negativos, como por ejemplo sufrir aislamiento en el trabajo, burlas y bromas pesadas que no son bien recibidas, ocultación de la información necesaria para realizar correctamente las tareas que debe desempeñar o críticas constantes y sin fundamentos, entre otros aspectos. Asimismo, han tenido en cuenta la repetición de estos comportamientos en el tiempo hacia una o varias personas, dejándoles en una posición de inferioridad o indefensión.
"Los principales factores son de carácter grupal y organizacional, tales como condiciones estresantes donde los roles están poco definidos y facilitan sentimientos de frustración; ambientes competitivos donde los equipos de trabajo no tienen la capacidad de integrar distintos puntos de vista y gestionar conflictos, y que favorecen 'la ley del más fuerte'; falta de liderazgo, y supervisión abusiva, entre otras situaciones", ha valorado en un comunicado José María León-Pérez, que ha liderado el estudio.
Objetivo: evitar falsos positivos
Los especialistas del Grupo de Investigación de Cármides han utilizado la técnica analítica de curvas ROC (acrónimo del inglés Receiver Operating Characteristic), para evitar falsos positivos e identificar de forma correcta a las personas de cada grupo. Este método se basa en la puntuación total que obtiene una persona al responder a un cuestionario o inventario de exposición a conductas de acoso, a partir de un punto de corte. Este enfoque, subrayan los especialistas, "resulta muy útil para evaluar la capacidad discriminativa de una prueba y se basa, principalmente, en la combinación de las puntuaciones obtenidas en una escala que mide la exposición a conductas de acoso mediante indicadores de salud y de bienestar psicológico previamente validados".
El proyecto se ha dividido en dos fases, una primera con los 5.000 participantes iniciales y uns segunda con un total de 2.095. En esta segunda fase, los investigadores analizaron el bienestar psicológico de estas personas a través de un cribado mediante una escala de ansiedad generalizada, la cual incluye puntuaciones normativas para establecer los niveles de angustia.
El estudio forma parte de la convocatoria anual Social Research para España y Portugal del Observatorio Social de la Fundación ”la Caixa”. Esta convocatoria promueve conocimiento de excelencia para comprender e identificar los desafíos que ha de afrontar nuestra sociedad mediante estudios basados en datos cuantitativos.
En el estudio han participado los investigadores José María León-Pérez, Francisco Javier Cantero, Míriam Benítez y José María León Rubio, del Grupo de Investigación Cármides de la Universidad de Sevilla, y Alejandro Orgambídez, del mismo grupo de investigación de la Universidad de Málaga.