La policía italiana continúa investigando el último suceso ocurrido durante la noche del jueves en Roma. Cinco días después de que la Roma y la Lazio jugaran el Derby della Capitale, se descubrieron cuatro maniquíes colgados en un puente próximo al Coliseo. Junto a los muñecos, tres de los cuáles vestían una camiseta de la Roma – De Rossi, Salah y Nainggolan, respectivamente-, se exhibió también una pancarta con la siguiente amenaza: “Un consejo, sin ofender… Dormid con la luz encendida”.

A día de hoy se desconoce el origen de este acto, aunque la policía italiana no descarta ninguna hipótesis y se baraja la posibilidad de que detrás de todo esto puedan estar los seguidores de la Lazio, máximo rival de la Roma en la capital. Además, tampoco se excluye cualquier opción que tenga que ver con los ultras de la Roma, quienes podrían haber acabado molestos tras la derrota de su equipo 1-3 el pasado 30 de abril.

 Un derbi radicalizado

 

Ganar a tu eterno rival supone muchas veces una alegría inmensa para muchos aficionados al fútbol, pero para otros significa llevar la celebración a límites más inverosímiles.

Después de que la Lazio saliera victoriosa del Derby della Capitale, algunos de sus hinchas se trasladaron hasta Trigoria, ciudad deportiva de la Roma, donde a modo de funeral pintaron numerosas cruces y ataúdes, encendieron velas y dibujaron cuerpos tendidos en el asfalto para alardear sobre su rival.

Las actuaciones policiales contra hinchas violentos en el fútbol italiano son una tónica muy habitual. Hace tan sólo una semana las fuerzas de seguridad tuvieron que arrestar a 13 radicales de la Roma, acusados de provocar incidentes violentos en el centro de la ciudad.

Además, los derbis de la capital cuentan con un largo historial de sucesos que han acabado provocando disturbios, apuñalamientos e incluso disparos en las últimas temporadas. Es por esto, salvo en algunas ocasiones, por lo que este partido ya no se suele jugar de noche.