Agentes de la Policía Nacional han arrestado a cuatro personas, cuyas edades oscilan entre los 24 y 26 años, bajo la acusación de incitación al odio. Estos individuos son considerados los principales responsables de una campaña de odio en redes sociales dirigida contra el futbolista del Real Madrid Vinícius Junior, antes del derbi madrileño del pasado septiembre. Según las fuentes policiales, los detenidos incitaban a los aficionados a asistir al estadio para proferir insultos vejatorios y discriminatorios con connotaciones racistas. La campaña se viralizó masivamente, generando una significativa alarma social.

La investigación se inició el 1 de octubre, tras recibir tres denuncias de la Liga Profesional de Fútbol. Estas denuncias alertaban sobre una campaña de odio que incitaba a los seguidores del equipo local a lanzar gritos e insultos racistas contra un jugador del equipo rival. Además, se sugería a los aficionados que acudieran con mascarillas para dificultar su identificación por parte de las autoridades. La viralización de esta campaña fue tal que se convirtió en trending topic, alcanzando casi mil setecientos millones de visualizaciones y más de 56.000 interacciones.

La campaña de insultos racistas contra Vinicius superó los 1.600 millones de visualizaciones

El impacto mediático de esta campaña fue notable, siendo ampliamente cubierto por medios de comunicación tanto nacionales como internacionales. La difusión masiva de la campaña no solo generó alarma social, sino que también impulsó a las autoridades a actuar con rapidez. Los días 14 y 15 de octubre, tras un exhaustivo análisis de la información disponible, se logró identificar y detener a cuatro varones como presuntos responsables de incitar al odio. La investigación sigue en curso, y no se descartan más detenciones.

Las autoridades han llevado a cabo un minucioso rastreo y análisis de las publicaciones denunciadas por la Liga de Fútbol Profesional. Este trabajo permitió identificar a los autores de los mensajes de odio que se viralizaron en redes. La Policía Nacional ha puesto a disposición de la autoridad judicial a los cuatro detenidos, quienes ahora enfrentan cargos por incitación al odio. La preocupación por el impacto de esta campaña ha sido objeto de debate en diferentes foros, subrayando la necesidad de abordar el discurso de odio en plataformas digitales.

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