Joseph Ratzinger (Benedicto XVI) ha defendido el celibato y su oposición a la ordenación de hombres casados en un libro escrito con el cardenal Robert Sarah, cuyo contenido adelanta Le Figaro y que se publicará el próximo 15 de enero. Precisamente éste es uno de los temás más candentes que recoge la exhortación apostólica que prepara el papa Francisco sobre el Sínodo de la Amazonia.

En el libro, titulado 'Desde lo profundo de nuestro corazón', Benedicto XVI escribe que cree "que el celibato" de los sacerdotes "tiene un gran significado" y es "indispensable para que nuestro viaje hacia Dios siga siendo la base de nuestra vida".

“El sacerdocio de Jesucristo provoca que entremos en una vida que consiste en convertirnos en uno con él y en renunciar a lo que nos pertenece sólo a nosotros”, defiende Ratzinger, y continúa: “Para los sacerdotes, esta es la fundación de la necesidad del celibato, pero también de la plegaria litúrgica, meditación de la palabra de Dios y la renuncia a los bienes materiales”.

La exhortación de Francisco

Los autores consideran que el cuestionamiento del celibato ha agravado la crisis de vocaciones en la Iglesia católica, por lo que piden a los sacerdotes de todo el mundo que lo preserven. El contenido del libro se conoce antes de que vea la luz la exhortación apostólica que Francisco prepara sobre el Sínodo de la Amazonia, en la que se recogerán algunas propuestas que fueron aprobadas por la asamblea de obispos. 

El documento final del Sínodo de la Amazonia, que se celebró en octubre en el Vaticano, recomendó que para paliar la falta de sacerdotes en la región se debería ordenar hombres casados y respetados en las comunidades, lo que constituiría el primer paso contra con la regla del celibato en la Iglesia católica. Aunque, en caso de aprobarse definitivamente, sería muy específica y no abriría oficialmente la puerta al celibato,los críticos con el Papa, entre los que también se encuentra su anterior prefecto para la Congregación de la Doctrina de la Fe, Gerhard Müller, consideran que se trataría del primer paso para “abolirlo".