Este martes Inés Arrimadas ha hecho público frente a la prensa su embarazo. Tras mucho tiempo buscándolo, tal y como ella ha reconocido, se ha mostrado “muy feliz” por la buena nueva.
"Es un poco pronto, no quería decirlo todavía porque me ha costado mucho. Pero estoy muy feliz y espero que esto no afecte a la campaña, intentaré hacerlo lo mejor que pueda", ha dicho la dirigente naranja visiblemente contenta y con una sonrisa de oreja a oreja.
La dirigente se convertirá en madre primeriza, al igual que su pareja, Xavier Cima, con quien contrajo matrimonio en 2016 en Jerez de la Frontera.
A pesar de mantener su vida personal alejada del escarnio público, la historia de la relación está marcada por los ideales políticos de cada uno de ellos. A la espera de su primer hijo, merece la pena rescatar cómo esta pareja consiguió superar un rifirrafe que no todo el mundo conoce: ella, profundamente españolista: él, en cambio, nunca ha ocultado ser un nacionalista catalán convencido.
Cima formó parte tiempo atrás de las listas de Convergència Democràtica de Cataluña, además de compartir mensajes proindependentistas de forma habitual en sus redes sociales: “Cataluña no es España”.
Pese a todo, Cima decidió apartarse de la primera línea en 2015 y no presentarse en la lista de Junts pel sí. Paulatinamente, tal y como ha publicado el diario ABC, ha ido abandonando su vinculación a la política, dejando su acta de concejal en el Ayuntamiento de Ripoll en 2016.
