Araceli Hidalgo (Guadix, 1924), la primera española en vacunarse del covid en diciembre de 2020, cumple este martes cien años. Un centenario para una de las personas más importantes de los últimos años, símbolo de la vacunación y pionera en la inoculación de la mayor campaña de inmunización de la historia de España. En un momento en el que la vacuna era sometida al escrutinio de los negacionistas y el miedo era generalizado, esta mujer, granadina de nacimiento y residente en el centro de mayores Los Olmos de Guadalajara, sirvió de ejemplo y abrió el camino con una sonrisa y confianza plena en el camino de la ciencia.

Un momento bonito y emotivo, símbolo de la lucha contra la crisis del coronavirus, que no pasó desapercibido para nadie. El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una entrevista concedida a ElPlural.com en el marco de la campaña electoral de las elecciones generales del pasado 23 de julio, reconoció que ver a Araceli Hidalgo poniendo su brazo para abrir el camino de la vacunación fue el momento más emotivo de toda la legislatura.

“Para mí, uno de los momentos más bonitos de la legislatura, sin ninguna duda, fue el primer día de la vacunación en Guadalajara, con Araceli. Además, con ella animando a la gente a que se vacunara. Yo cuando me reunía con los científicos al principio de la pandemia, me decían: "Presidente, si tenemos vacuna, será dentro de cuatro o cinco años". Entonces, claro, el planteamiento de tener que ponerte frente a una cámara de televisión y tratar de trasladar una calma que no tenías, una seguridad que era imposible poder tener porque la ciencia todavía no había dado con la tecla para lograr un remedio, una vacuna ante la Covid-19, situaba a España y al mundo en un túnel muy difícil”, explicaba el líder del Ejecutivo a las preguntas de ElPlural.com.

Fue uno de los momentos más bonitos de la legislatura

Un reconocimiento que se ha redoblado este mismo martes, cuando, con motivo de los cien años recién estrenados de Araceli Hidalgo, las autoridades han aprovechado la oportunidad de felicitar a la protagonista de aquel inspirador 27 de diciembre de 2020: “Hoy es un día muy especial en el calendario. Araceli Hidalgo cumple, ni más ni menos, que 100 años. Recuerdo su actitud alegre y su buena disposición al recibir la primera vacuna contra el covid-19 en España. Ella se convirtió en un faro de esperanza. ¡Muchas felicidades!”.

El día de la vacunación

Era un domingo de finales de 2020. 27 de diciembre, cuatro días antes de despedir el año más turbulento de la historia reciente de España. Fue entonces cuando Araceli Hidalgo, junto a la enfermeda Mónica Tapias, recibieron la primera dosis de la vacuna contra la covid-19. Su reacción no pudo ser más espontánea ni más aplaudida.

Aquel día lo supimos todo de ambas protagonistas. Araceli tiene una hija y un hijo, cuatro nietos y un bisnieto y es oriunda de Guadix (Granada), pero lleva 29 años empadronada en Guadalajara, de donde Mónica es natural.

Una granadina y una manchega que abrieron el camino: "Muy nerviosa", se reconocía Araceli a su llegaba. Previamente al pinchazo, las cámaras la captaban santiguándose; posteriormente, riendo: “Un poco de picor”. Ni más, ni menos.

Minutos después era Mónica, enfermera de la residencia, la primera sanitaria en recibir la vacuna: “Un orgullo”, indicaba, lamentando que la vacuna no llegase a tiempo para todos los fallecidos a causa de la pandemia. "A ver si por fin se acaba ya esta enfermedad", deseaba la sanitaria, que, después de los focos, continuó como todos los días con su jornada laboral.

La campaña de vacunación fue un éxito

Araceli fue la primera persona en vacunarse y su imagen dio la vuelta a todo el mundo. Pero la instantánea de aquella residencia de Guadalajara sirvió de pionera para que una amplísima mayoría de ciudadanos se inmunizaran contra el virus, a pesar de las críticas vertidad desde los sectores más reaccionarios e, incluso, de las encuestas; que vaticinaban en un primer momento que solo entre el 30% y el 40% de la población estaba decidida a vacunarse y que hasta el 40% tenía reticencias a ello, principalmente por miedo a los efectos secundarios.

Sin embargo, la sociedad española volvió a dar ejemplo y demostró la confianza que depositan en la investigación y en sus sanitarios. Los datos así lo evidencian, y es que el 92,6% de los mayores de 12 años completaron la pauta vacunal, porcentaje que rozó el 100% entre las personas con más de 80 años