El próximo domingo se celebran las elecciones andaluzas. Una cita marcada en rojo en el calendario de la formación ultraderechista Vox, a la que los sondeos otorgan hasta cuatro escaños. Una cifra muy importante, teniendo en cuenta la ideología del partido liderado por Santiago Abascal, y también que hasta hace unos meses nadie contaba con ellos en el tablero político. 

Entonces, ¿cómo es posible que un partido que hasta hace nada pasaba desapercibido pueda ahora aspirar a cuatro escaños? Pues fundamentalmente porque han sabido jugar sus cartas como nadie. Desde la formación ultraderechista saben que sus bazas pasan por apelar al votante descontento de derechas, que quiere un cambio drástico. Bajo ese contexto, los lugares escogidos por Vox para realizar los últimos actos de campaña antes de los comicios andaluces hablan por sí solos.

Entre paro e inmigración

El viernes pasado, los de Abascal lucieron músculo en Linares, ciudad de Jaén, donde la tasa del paro es la más alta de España (39%) y donde (para desgracia de sus habitantes), ha desaparecido la totalidad de la industria de extracción minera que en su día la convirtió en la ciudad más próspera de Sierra Morena. Allí llenaron el salón del Hotel Cervantes

Apenas 24 horas después se desplazaron más al sur, concretamente a Almería. Nuevamente un territorio para nada escogido al azar, sino que se trata de la provincia española con mayor porcentaje de extranjeros, 19,7%, siendo la media nacional de 10,1%. Allí, se pudieron escuchar duros alegatos contra la inmigración y los inmigrantes ("Son una invasión que viene a sustituirnos"), buscando nuevamente captar el voto de la población más crispada. 

Acto seguido, Javier Ortega Smith, secretario general de Vox visitó la castiga localidad gaditana de La Línea de la Concepción. Se trata de un territorio donde el paro (el segundo mayor de España con 32,75%) y el tráfico de drogas han provocado un malestar general de la sociedad que desde la formación ultraderechista aspiran a convertir en votantes afines. 

Linares, Almería y La Línea de la Concepción en apenas 48 horas. Localidades solo representan tres ejemplos de territorios en los que Vox ha centrado su campaña, basada, sin duda, en el voto de los más quemados.