Este viernes, el Ayuntamiento de Barcelona aprobó una resolución con la que "condena el posicionamiento del rey Felipe VI" en el tema del "conflicto catalán" y por ello pide la abolición de la monarquía. El consistorio le dió el visto bueno a la medida presentada por la CUP, que contó con el sí de Barcelona en Comú, el PDeCAT, ERC, y los dos concejales no adscritos, Gerard Ardanuy y Juanjo Puigcorbé. 

El asunto provocó, como era de esperar, diferentes reacciones, entre las que se cuenta la del candidato a la alcaldía de Barcelona Manuel Valls. El galo criticó este texto y acusó a Ada Colau de ser una "una persona de la que no nos podemos fiar". 

Sin embargo, el mensaje no quedó sin respuesta.Colau contestó afirmando "que una republicana defienda la República es bastante previsible" y devolvió la pelota al tejado del francés.