El Ayuntamiento de Barcelona ha ordenado detener unas obras "ilegales" que pretendían construir los llamados "pisos colmena" en un local situado en el número 114 de la calle de la Constitución, en el distrito de Sants-Montjüic.

Las obras en este local para cambiar su distribución y habilitar en él pequeños habitáculos residenciales de apenas tres metros cuadrados que no se ajustan a la legislación vigente en materia de vivienda "no contaban con el permiso adecuado", ha indicado el consistorio.

En declaraciones a los medios, la teniente de alcalde de Ecología, Urbanismo y Movilidad, Janet Sanz, ha subrayado que este proyecto no se puede desarrollar en Barcelona "porque es ilegal, porque la infravivienda y el hacinamiento no están recogidos en la ley y no tienen paraguas legal".

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El Gobierno municipal reitera que un tipo de alojamiento como éste no se ajusta a los requisitos mínimos de habitabilidad que se exigen para poder vivir con dignidad y en unas condiciones adecuadas, y que un proyecto así no tiene cabida en Barcelona.

Una obra sin permisos

Según la nota de prensa del Ayuntamiento de Barcelona, a raíz de la información ciudadana y de las noticias surgidas en los medios de comunicación, los servicios técnicos municipales han realizado una inspección y han detectado que los promotores estaban haciendo obras para cambiar la distribución del local sin el permiso correspondiente.

Este documento no da cobertura a este tipo de intervención en un local o una vivienda, para lo que se requiere un comunicado de obras o una licencia de obra mayor, permisos que no han tramitado los promotores de los "pisos colmena" de Sants.

Teniendo en cuenta estas irregularidades, agentes de la Guardia Urbana se han personado en el local y han requerido a los propietarios que paralicen las obras, ha informado el ayuntamiento que dirige Ada Colau.

Paralelamente, los servicios de inspección del Distrito de Sants-Montjuïc tramitarán el expediente correspondiente con la información recopilada para ordenar un cese de las obras. En caso de que no se acate, una vez transcurridos los plazos establecidos se procedería al precinto de los trabajos.

Según fuentes municipales, "durante la inspección los responsables de las obras han reconocido que las estaban desarrollando para habilitar pequeños habitáculos residenciales que no cumplirían de ninguna manera la legislación vigente en materia de vivienda".