La visita exprés del Juan Carlos I a España, la primera tras huir a Abu Dabi hace casi dos años perseguido por un siniestro horizonte judicial por sus oscuros negocios, ha generado el rechazo unánime de los socios del Gobierno, que pese a que denuncian que el rey emérito se ha reído de los ciudadanos con su actitud “chulesca”, ironizan con que es una “fábrica” de republicanos.

El diputado y portavoz parlamentario de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Gabriel Rufián, ha calificado de “vergonzante” que el emérito se paseara por Sanxenxo evitando dar explicaciones recurriendo a una “chulesca” actitud. No obstante, ha matizado que, precisamente esta escena ha hecho del exmonarca una perfecta “fábrica de republicanos”.

Es el mejor republicano del país”, ha ironizado durante una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados. Por ello, le ha invitado a mantener el rumbo: “Está haciendo una labor extraordinaria”. Eso sí, le ha pedido que, en caso de regresar a España, tal y como se está confabulando, “se busque un alquiler” pagado por él mismo y, cuando lo encuentre, que se pase por los tribunales a aclarar lo ocurrido.

Asimismo, en la misma tónica que EH Bildu, ha recordado al Gobierno que tiene las herramientas para trasladar el malestar con la corona al Boletín Oficial del Estado. La portavoz de la izquierda abertzale, Mertxe Aizpurua, ha utilizado términos muy semejantes a los blandidos por Rufián, aunque el tono ha sido menos humorístico. A su juicio, Juan Carlos I ha protagonizado un espectáculo “bochornoso y absurdo”.

El PSOE también censuró la visita. La propia Carmen Calvo, exvicepresidenta, empleó el mismo término: “Bochorno”. En este sentido, Aizpurua ha instado a los socialistas a retirarle el título de emérito y suprimir la inviolabilidad.

Con respecto a un futuro regreso, la diputada vasca ha asegurado que “nos es indiferente” porque “no es nuestro rey”, pero “sí es lamentable su falta de respeto a los que se supone que son sus súbditos”.

El líder de Más País, Íñigo Errejón, también ha aplaudido que el emérito contribuya a la causa republicana encabezando “la más intensa campaña de desprestigio contra la monarquía”. Reproches y bromas aparte, Errejón ha registrado por tercera vez su propuesta para que el Congreso revise y reforme la inviolabilidad del jefe del Estado, limitándola a las labores de su cargo para impedir que le ampare de consecuencias jurídicas por “cobrar comisiones o no pagar impuestos”. Hasta la fecha, las otras dos ocasiones en las que la Mesa ha abordado la iniciativa la ha tumbado gracias a la negativa de PSOE, PP y Vox.

Joan Baldoví, diputado y portavoz de Compromís, también se ha referido a Juan Carlos I como una “fábrica” de republicanos, al tiempo que ha manifestado que espera y desea que su actitud sirva para que España “se libre de la monarquía” de “una vez por todas”.

Más País y Compromís han registrado una batería de preguntas para que Moncloa explique cuánto ha costado el despliegue de seguridad durante la visita del emérito, quién sufraga sus desplazamientos aéreos, quién paga todo lo derivado de su visita y cuál es el motivo por el que regresará.

El PSOE dice 'no'

Por su parte, Héctor Gómez, portavoz del Grupo Socialista, ha lamentado que Juan Carlos I no haya dado “explicaciones” al tiempo que ha razonado que no contempla ni reformar la figura de la inviolabilidad del rey ni dar vía libre a una comisión de investigación parlamentaria sobre el emérito.

De esta manera, el PSOE continúa reclamando "explicaciones públicas" al rey emérito, pero no considera necesario que éstas se ofrezcan en el Congreso y mantiene "cerrada" la vía de la comisión de investigación que reclaman sus socios de Unidas Podemos y sus aliados parlamentarios. Tampoco está dispuesto a abrir el debate sobre la regulación de la figura de la inviolabilidad del rey para limitarla a sus actos como jefe del Estado, pero no a su vida privada. "No contemplamos abrir ese espacio", ha dicho Gómez, pese a que el propio Pedro Sánchez se mostró en su momento partidario de analizar esa posibilidad.