Santiago Abascal, presidente de Vox, ha sido entrevistado este domingo en el diario La Razón, donde ha repasado el auge de su partido en los últimos meses y su éxito en las elecciones andaluzas. Sobre estos comicios ha reconocido la sorpresa de su éxito: "Nunca pensamos que íbamos a sacar doce escaños, pero intuíamos que podía pasar algo muy grande", ha confesado. 

Preguntado por la posición de su partido con respecto a la Ley de Igualdad y por la etiqueta de machista que cuelga sobre su persona, Abascal ha asegurado que "es propaganda, ganas de hacer daño y no me preocupa lo más mínimo. Me preocuparía que lo pensase mi madre, mi mujer o mis hijas y que no me dejasen entrar en casa".

En lo relativo a la Ley de Violencia de Género, ha destacado que el cree que  "la mayor parte de las mujeres sensatas están preocupadas con la actual Ley porque convierte en sospechosos, sin presunción de inocencia, a sus hijos varones. Lo que nosotros queremos es una ley de violencia intrafamiliar que proteja a la mujer, pero también a los varones de las denuncias falsas".

Interrogado sobre si Vox es un partido de la órbita de Le Pen o  de Trump, el líder de Vox ha respondido que su partido es  "la órbita de Ortega Lara, Santiago Abascal, Javier Ortega, Rocío Monasterio y de millones que ya están afiliados", y ha señalado que "solo orbita en torno a los intereses de España". Sin embargo ha reconocido que "nos identificamos más con esas referencias que con Angela Merkel que está destrozando Europa abriendo las puertas a la inmigración masiva y a la destrucción de la soberanía de los estados nación".

El líder de la ultraderecha española, ha definido así su partido: "Vamos a la raíz de los problemas y defendemos las cosas con radicalidad, en el buen sentido. Extremistas no nos consideramos, pero quien nos ve así es que está muy lejos de nosotros y nos alegramos de tener lejos a los comunistas, a los separatistas y a los que han justificado el terrorismo".