El presidente del Gboerno, Mariano Rajoy y la Canciller alemana, Angela Merkel, en el Congreso del Partido Popular Europeo, hoy, en Berlín. EFE

 

 


Mariano Rajoy, presidente del PP y presidente del Gobierno, y María Dolores de Cospedal, Presidenta de Castilla La Mancha y número dos del partido, han votado en unas primarias. No lo han hecho en España, sino en Dublín, donde los populares europeos se han reunido para elegir al candidato conservador para presidir la Comisión Europea. Ha salido elegido el candidato de la canciller alemana Ángela Merkel, el luxemburgués Jean Claude Juncker, a quien ya intentó colocar hace años para sustituir a Durao Barroso. Han sido las primeras primarias de la historia del Partido Popular Europeo (PPE) y competían al francés Michel Barnier y Juncker.

"Dedo divino" en Andalucía, primarias europeas
El Partido Popular español se resistió a que se celebraran esas primarias porque coloca al partido de Gobierno en una contradicción: ¿Por qué unas primarias para elegir el candidato a presidir el Consejo Europeo mientras en Andalucía se acaba de utilizar el "dedo divino" en palabras de Esperanza Aguirre?. La pregunta puede ser más escueta ¿Por qué primarias en Europa sí en España no?

De momento no hay fotos en los servicios de agencias de comunicación, pero tanto Rajoy como Cospedal y el resto de la delegación español del PP pasaron por la correspondiente cabina para elegir papeleta y luego la depositaron en una urna. Curiosamente Rajoy aceptó la elección del candidato en una cena de líderes conservadores celebrada el pasado jueves y el número dos del PPE, el español Antonio López-Isturiz, se apresuró a presentar estas primarias europeas como una prueba clara de la calidad democrática de su partido. De momento ningún candidato del PP a un puesto en política nacional se ha elegido por primarias.

Cambio de cromos
Aunque los líderes conservadores europeos dieron el visto bueno a esas primarias y a que hubiera dos candidatos, nadie dudaba de que el candidato de Merkel, Jean Claude Juncker, ganaría. Era obvio porque Juncker representa a Luxemburgo, un minúsculo país de la Unión Europea como muy pocos delegados en el PPE. Votaban 800 delegados, y la delegación del Partido Popular español, con 58 delegados, sí era relevante aunque votaron 56 por dos llamativas ausencias: Mayor Oreja y Alejo Vidal-Quadras. El partido Popular se ha encargado de contar a los periodistas españoles desplazados a Dublín que Rajoy negoció con Merkel el apoyo a Juncker a cambio de obtener puestos relevantes para españoles en el próximo Gobierno Europeo. Las pretensiones de Rajoy pasan porque el Ministro de Agricultura, Arias Cañete, sea Comisario de Agricultura y vicepresidente de la Comisión dado que Joaquín Almunia, actual vicepresidente, agota mandato. También  quiere que el ministro de Economía, Luis de Guindos, presida el Eurogrupo (reunión de los ministros de economía y hacienda de los países del euro). Tanto Cañete como de Guindos están deseando largarse a Europa. Falta por conocerse que ha conseguido Rajoy porque de ello dependerán los cambios en el Consejo de Ministros. El silencio de Rajoy tiene a todo el PP con el alma en vilo.