El presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, ha empezado el año con una entrevista en El Faro de Vigo aprovechando que pasa la Navidad en Galicia. La entrevista le ha servido para dejar un sorprendente mensaje al erigirse como un firme defensor de la conciliación familiar que él practica a título personal. Así, presume de que "ceno con mi familia todos los días" y "la conciliación debe ser posible", aunque según él "el problema es cultural; no es fácil ni puede imponerse la conciliación". El diario pontevedrés explica que el presidente desayuna y cena todos los días, a las nueve, con su familia, y da la explicación del propio presidente para conseguirlo: "Porque me ordeno bien". 



El Gobierno de Rajoy acabó el año indignando a millones de españoles cuando su ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, defendió que los emigrantes se van del país "por amplitud de miras". No entró en las razones de falta de trabajo o bajos sueldos que obligan a muchos a buscarse la vida fuera de su tierra y presentó un escenario idílico de la migración propio de su situación privilegiada. Rajoy repite la fórmula al presumir de "conciliación" familiar a pesar del escenario laboral que viven millones de españoles y en el que la conciliación es imposible. Claro, que en el caso de ser miembro del Ejecutivo mariano la vida puede ser muy diferente: