Agosto llega a su ocaso y todo está dispuesto para el inicio del nuevo curso político. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, así como el líder de la oposición, Pablo Casado (PP) y el resto de contendientes ya han regresado de sus respectivas vacaciones. El Gobierno es perfectamente consciente de los deberes que le aguardan tras el parón estival. La atroz crisis en Afganistán cambió el foco de los objetivos del Ejecutivo, pero PSOE y Podemos saben que dos asuntos son los más acuciantes y, además, los más simbólicos para el Gobierno de coalición: el precio de la luz y la regulación del mercado de la vivienda.

Este lunes el precio medio diario de la electricidad vuelve a dispararse y pulverizará un nuevo récord histórico, alcanzando los 124,45 euros por megavatio (MWh). Hasta la fecha, la cota más alta era la del 26 de agosto, con 122,76 euros/MWh. La situación es alarmante y el bolsillo de los españoles no da para más.

Teresa Ribera, vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, acude este lunes al Congreso de los Diputados con el objetivo que aclarar la situación. Fue la propia ministra la que solicitó comparecer, pero todos los grupos exigieron que lo hiciera en la Diputación Permanente, por lo que no habría tenido escapatoria alguna.

Un núcleo espinoso

En política no vale con ser, también se ha de parecer. Mucho se ha escrito y comentado sobre el complejo contexto del mercado de la energía eléctrica, pero al final, lo importante para los ciudadanos y ciudadanas es que “el Gobierno más progresista” no ha sido capaz de abordar la escalada de precios. Así las cosas, socialistas y morados tienen un vasto desafío ante sí. Uno de esos retos cuyo desenlace a buen seguro se recordará de cara a las próximas elecciones generales. Si el Ejecutivo acierta, se apuntará un tanto; de lo contrario, podrían ser dos puntos los que se reste.

El qué hacer está claro: abaratar el precio de la luz. Otra historia es el cómo. Es uno de los puntos de fricción de PSOE y Unidas Podemos, hasta tal punto de que los socialistas, apremiados por los morados, se han abierto por primera vez a valorar la creación de una empresa energética pública.

La formación liderada por Ione Belarra propone limitar la factura energética nuclear y la hidroeléctrica vía decreto. Ante esto, Ribera se ha limitado a decir que valorará su "viabilidad con las máximas garantías”; advirtiendo que el plan de su socio de Gobierno "adolece de un análisis sobre su compatibilidad con la normativa comunitaria”. En otras palabras, Ribera agradece la sugerencia, pero no se prevén cambios estructurales; lo que no quiere decir que no haya modificaciones. Según ha adelantado El Periódico, la ministra anunciará en los próximos días las medidas que implementarán.

Diferencias... ¿insalvables?

Al igual que la luz, el precio del alquiler se ha disparado y es otro de esos asuntos que pone en jaque al Gobierno por varios motivos. El primero es que afecta directamente al bolsillo de los españoles, el segundo que los socios del Ejecutivo no están ni cerca de lograr un acuerdo de mínimos; y al igual que con la factura energética, pueden salir reforzados o muy mal parados.

PSOE y Unidas Podemos firmaron un pacto de investidura y legislatura que recogía la regulación del mercado del alquiler. El documento es bien claro, pero el ya exministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, realizó una defensa a ultranza de una política de no intervención del mercado. Podemos insiste en la necesidad de establecer techos máximos a los alquileres en las zonas tensionadas; mientras los socialistas apuestan por establecer beneficios fiscales para los arrendadores. Las negociaciones para aprobar una ley de vivienda continúan estancadas y pese a que Raquel Sánchez sustituyó a Ábalos tras las modificaciones introducidas por Sánchez en su Ejecutivo, no se prevé un cambio significativo.

Aguarda un agosto caliente para PSOE y Unidas Podemos. Muchos son los puntos calientes que deberán afrontar en esta nueva etapa de la legislatura post pandemia y sus decisiones serán determinantes para su futuro. Gloria o infierno.