Después de la conformación del nuevo Gobierno central de Pedro Sánchez, han derivado otras reorganizaciones en instituciones públicas. En el caso de Paradores de Turismo, la nueva presidenta-consejera delegada será la exministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de la anterior legislatura, Raquel Sánchez. Una decisión que han criticado desde el Partido Popular, aunque olvidan algunos de sus nombramientos al respecto, como es el caso de la exmujer de Rodrigo Rato que revalidó el cargo de presidenta de Paradores en 2016 mientras el Gobierno de Rajoy estaba en funciones.

La compañía pública, hasta el momento, estaba dirigida por Pedro Saura desde el verano de 2021, quien ahora pasará a ser el presidente de la Sociedad Estatal de Correos y Telégrados en sustitución de Juan Manuel Serrano.

Unos nombramientos que no han tardado en despertar las críticas de Génova 13 este jueves, pese a que los populares hicieron sus movimiento a favor allá por 2016, cuando el Gobierno de Mariano Rajoy -en funciones en aquel momento- renovó a María Ángeles Alarcó Canosa presidenta de Paradores, es decir, la exmujer del exministro de Economía Rodrigo Rato y amiga cercana de Ana Botella y Esperanza Aguirre. Pese a que la noticia trascendió en el mes de septiembre de aquel año, la reelección se efectuó tres meses antes, aunque ni Paradores ni Industria lo comunicaron por las vías oficiales.

Su elección fue polémica debido a que no ejerció previamente ningún cargo relacionado con este puesto ya que, según su experiencia laboral en la web de Paradores, ejerció puestos de responsabilidad en Aguas de Fuensanta -empresa de la familia de Rodrigo Rato- y, posteriormente, sí que fue nombrada en el Gobierno de Esperanza Aguirre como vicepresidenta ejecutiva y consejera delegada de Turismo Madrid. María Ángeles Alarcó siguió al frente de Paradores con un sueldo anual de 173.184 euros, según cifró entonces El Confidencial.

Feijóo critica la “agencia de colocación” de Sánchez  

El líder del Partido Popular y de la oposición al Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, así lo ha manifestado en la rueda de prensa de este jueves en la que ha hecho balance de este año que está por terminar.

“Donde debe haber instituciones neutrales que velen por el interés general, Sánchez las ve como un botín o como una agencia de colocación con independencia de la formación y experiencia de los colocados. Ha sucedido en la Fiscalía General, en el Tribunal Constitucional, sigue sucediendo en el CIS, en el Consejo de Estado, RTVE, el CNI, la Agencia EFE, en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la Comisión Nacional de Competencia, Hispasat o Correos. La lista, realmente, es muy larga”, ha enumerado el líder conservador.

En estos términos, ha señalado que Sánchez “cree que debe controlar, intervenir y poner a los cesados y a los damnificados por mis políticas de nombramiento”, pero desde su formación Feijóo defiende que saben “muy bien que hay políticos que pueden servir para una cosa y no para otra, y que hay personas que no tienen experiencia en gestión y, en consecuencia, esas personas no pueden estar al frente de las empresas públicas o de los organismos más importantes del Estado”.

Almeida coloca al marido de Javier Maroto en el Ayuntamiento de Madrid

Pese a la crítica esgrimida por Feijóo contra Sánchez, lo cierto es que el PP en las últimas horas ha realizado un nombramiento de unas características similares. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, fichó el pasado mes de octubre al marido del vicepresidente del Senado Javier Maroto para el área de Urnabismo, Medio Ambiente y Movilidad, en un puesto de libre designación para el que se presentaron hasta 23 candidatos y en el que, según cifra El País, cobrará 90.000 euros anuales.

Debido a este escenario, las redes sociales se han hecho eco de este cruce de reproches y movimientos del PP. “Martínez-Almeida, que carga contra Sánchez por el nombramiento de la exministra Raquel Sánchez como nueva presidenta de Paradores de Turismo, contrata al marido del senador del PP Javier Maroto para un puesto de libre designación y le pagará 90.000 euros al año”, resumía un usuario. “El mismo día en el que Feijóo ha criticado la designación a dedo de los nuevos presidentes de Correos y Paradores”, apuntaba, por su parte, otro usuario.