Podemos se ha negado a ofrecer información sobre la muerte de un miembro del equipo encargado de montar los mítines del partido, ocurrida durante los preparativos del acto del secretario general, Pablo Iglesias, en Palma, en la campaña electoral del 20-N. La formación no ha respondido a las preguntas de El Plural sobre estos hechos.

La dirección de Podemos no respondió a varias solicitudes de información sobre la muerte del trabajador, remitidas por el comité de empresa y por la abogada del partido.Incluso, ésta fue apartada de su puesto cuatro días después de contactar con los máximos responsables de la formación para pedirles datos sobre las condiciones laborales del empleado y preguntar si se habían comunicado los hechos a la Inspección del Trabajo, según adelanta El Confidencial.

Subió a su habitación de hotel porque se sentía mal

La muerte del trabajador, A. L. B. J., miembro del departamento de Producción de Podemos, encargado de montar los eventos del partido, se produjo de manera repentina, el pasado 1 de noviembre, tras desplazarse desde Madrid a Palma para preparar uno de los primeros actos de Pablo Iglesias en la campaña de las elecciones generales. Unas horas antes del comienzo del acto, el trabajador, de 51 años, dijo a sus compañeros que se sentía mal y subiría a su habitación del hotel a descansar un rato. Pasado un tiempo, como no respondía a sus llamadas, acudieron a la habitación y abrieron la puerta. Se encontraron al hombre ya fallecido.

El partido no informó a la plantilla de la muerte

Sus compañeros quedaron muy afectados, pues el hombre había colaborado con Podemos desde sus inicios. Sin embargo, la dirección del partido ocultó la triste noticia y al día siguiente, en el mitin celebrado en el Palacio de Congresos de Palma, Iglesias no hizo ninguna mención al suceso ni comunicó a la plantilla lo ocurrido. El comité de empresa envió un correo a la gerente estatal, Rocío Val y a la Dirección de Recursos Humanos para exigirles que trasladaran a todos los trabajadores lo sucedido. 

En su escrito, el comité de empresa pedía a la dirección que "realicéis dicha comunicación oficial, durante el día de hoy, a todas las compañeras, por el canal que veáis más oportuno”, sobre la muerte, producida supuestamente por un infarto de corazón, y añadía que "resultó duro para el equipo sacar adelante un evento con esta triste noticia, que les llegó a cuentagotas sin que nadie reuniera al equipo para informarles; resultó duro que no se hiciera ni una mención al compañero durante el evento, que había preparado él mismo. Quedamos a la espera de vuestra contestación a este compromiso necesario”.

Estudiar si procede una indemnización a su hija

El comité de empresa envió el mismo correo al departamento de Cumplimiento Normativo, encargado de que el partido y todos sus trabajadores respeten la legalidad. Mónica Carmona, abogada de esta sección, respondió, el 4 de noviembre, que procedía “a incoar diligencias” para comprobar si la formación había actuado correctamente en este caso, si las condiciones laborales del trabajador pudieran ser la causa y debiera valorarse una indemnización, ya que el fallecido tenía una hija. El hombre vivía de manera modesta en una habitación en un piso de alquiler, en un tercero sin ascensor, situado en uno de los barrios más humildes de la capital. 

La abogada del partido también pidió información

La abogada envió un correo a la gerente, la dirección de Recursos Humanos y el secretario de Organización, Alberto Rodríguez, para solicitar información. “Dado que el fallecimiento se produjo durante un desplazamiento por motivos de trabajo, como responsable de Cumplimiento Normativo debo realizar una investigación interna de las circunstancias en las que se produjo el fatídico desenlace, con carácter preventivo, al objeto de evitar cualquier tipo de responsabilidad penal o administrativa para el partido”, escribió Mónica Carmona.

“Para ello, y de acuerdo con el Protocolo de Actuación del Departamento de Cumplimiento Normativo, os agradeceré que a la mayor brevedad posible, y como máximo en el plazo de 48 horas, me facilitéis la siguiente información”, añadía la letrada, que solicitaba una relación detallada de los hechos, de las funciones específicas del trabajador, el trabajo de producción del evento, la  fecha del desplazamiento a Palma, lugar del fallecimiento, circunstancias en que se produjo, así como las acciones realizadas por el equipo de Producción y Recursos Humanos tras conocer el fallecimiento. Además, datos del contrato laboral del trabajador, jornada de trabajo contratada y control horario de las jornadas laborales realizadas. La dirección de Podemos no contestó ni al comité de empresa ni a la abogada.

El escueto mensaje de la dirección

El 6 de noviembre, la cúpula del partido informó en un escrito de cuatro líneas que el trabajador había muerto y que el velatorio se celebraría al día siguiente en el tanatorio de Móstoles. Su siguiente mensaje no tenía ninguna vinculación con lo sucedido, ya que fue para recordar a toda la plantilla de Podemos que el 20-N estaba convocada para una fiesta en la Sala Caracol para celebrar los resultados electorales. La invitación iba acompañada de emoticonos de copas de vino y una folclórica bailando.

El 27 de noviembre, el comité de empresa envió otro correo a la dirección, a la empresa de riesgos laborales contratada por el partido, Grupo 17, y a la Secretaría General de Pablo Iglesias, en el que reprochaba que “han pasado más de 20 días desde el fallecimiento y la Organización asombrosamente no ha comunicado oficialmente la causa, los motivos, las particularidades, ni la relación laboral que pudiera tener o no la causa de la muerte”.

El partido instó a borrar los mensajes de condolencia

En el correo del comité de empresa quedó reflejado que el partido ordenó a los trabajadores que borraran de las redes sociales todos los mensajes de recuerdo al compañero fallecido. “También cuestionamos la forma de actuar de Rocío Val como responsable/gerente por contactar personalmente con personas que tienen o han tenido relación laboral con la Organización instando a que borraran sus mensajes personales de condolencia publicados en sus redes sociales, a pesar de que ella misma ya había contactado anteriormente con al menos dos familiares directos”, afirmaba el comunicado.