Este lunes se cumple una semana desde la publicación de la sentencia del procés que disparó las movilizaciones masivas pacíficas y las protestas nocturnas violentas. La situación en Cataluña ha copado el epicentro del debate político. El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Pablo Casado, visitarán Barcelona a lo largo del día.

Sánchez anunció que acudiría a Barcelona a través de un tuit publicado en su cuenta oficial, donde también informó de que había remitido una carta al president de la Generalitat, Quim Torra, instándole a condenar la violencia, amparar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y recordándole que, como líder del Govern, debe cumplir y hacer cumplir la ley.

Esta misiva ha sido enviada después de que Torra llamara a Sánchez sin recibir respuesta, lo que ha dejado una de las imágenes más esperpénticas de este capítulo: TV3 grabó el momento en que el president es informado de que el líder socialista no se pone al teléfono, y lamenta que “es increíble”, llegando incluso a espetar “quins collons” (qué cojones).

"Ha vuelto la espalda a las fuerzas y cuerpos de seguridad autonómicos y estatales, que protegen el orden público con gran profesionalidad y exponiéndose a graves riesgos", señala Sánchez en la carta; y añade: "Ha vuelto la espalda e ignorado a más de la mitad de la población catalana simplemente porque no comparte sus propósitos en vez de comportarse como el presidente de todos los catalanes".

El líder del PP también estará en Cataluña este lunes. Tenía previsto visitar la Jefatura de Policía en Via Laietana en torno a las 13:00 horas, pero según apunta, “ahora” no le dejan ir: "Probablemente no podremos entrar porque querrá entrar él".

En cualquier caso, Pablo Casado ha celebrado la visita de Sánchez a la Jefatura de Policía: “Nos parece estupendo”. Y es que, según ha explicado en un desayuno informativo, su formación está “en el electoralismo” y ve con buenos ojos que el Gobierno de España visite a los heridos, ofrezca más medios para afrontar los disturbios y haya un "mando único" para coordinar las fuerzas de seguridad.

¿Se reunirá con Torra?

El president de la Generalitat ha enviado una carta a Sánchez, como respuesta a la misiva en la que éste le instaba a “condenar rotundamente la violencia” y amparar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”. En esta nueva epístola, la segunda que le envía después de que Sánchez rehusara cogerle el teléfono, el líder del Govern le pide una reunión con motivo de su visita a Barcelona.

Torra le comunica que “volveremos a ponernos en contacto con usted vía telefónica” para concretar una cita y dialogar “sin condiciones”.

En la carta, el president le reprocha que “como ya sabe, esta semana le he telefoneado dos veces y no se ha querido poner”, pero le agradece que “me escriba”.

En su respuesta, Torra considera que las obligaciones de un gobernante son “respetar y hacer respetar los derechos humanos, cívicos y políticos de los ciudadanos; “propiciar el diálogo entre aquellos que piensan diferente; y favorecer la expresión democrática.

Por último, Torra afea a Sánchez que “no es buen signo de voluntad de diálogo”.