Nos comentaban que la situación de “Caso espionaje” de Mijas era susceptible de empeorar. Desde el Partido Popular advertían ayer del temor a que no solo fuera en el ente público donde se hubieran dado esas supuestas prácticas de grabaciones de conversaciones de concejales y trabajadores, pinchazos de teléfonos, existencia de cámaras ocultas, control remoto de los ordenadores y acceso a los correos electrónicos. Un material incautado por el perito judicial de 800 GB da para mucho y sobre todo da miedo y recelos.

Ayuntamiento en “default” provisional
Por todo eso el Tesorero del Ayuntamiento de Mijas ha paralizado toda la actividad económica del Consistorio, así como ha decidido apagar los ordenadores de las áreas a su cargo, Recaudación y Tesorería. También ha ordenado un barrido de los ordenadores, que se rastree por si hubiera cámaras o micrófonos ocultos  y que se presente una denuncia o una querella por estos hechos. Todas estas medidas traen como consecuencia la paralización en la práctica del Ayuntamiento y de cualquier operación que conlleve pago así como que se realicen ingresos a la hacienda local. En la práctica un Consistorio default a dos meses de las elecciones.

Equipo de Gobierno en estado de shock
Estas decisiones se encuentran con la oposición del alcalde, Juan Carlos Maldonado (Cs), que ve como en unas fechas tan cruciales en vísperas de elecciones municipales el quebranto político administrativo puede ser muy dañino. En todo caso son consecuencia del escándalo que ha estallado en el Mijas Comunicación cuyo Consejo de Administración preside. Las informaciones recabadas por ElPlural.com indican que el equipo de Gobierno se encuentra en una situación lindante entre el estado de shock y el temor a las consecuencias políticas de este escándalo del que los concejales en la oposición se temen que podría ser solo “la punta del iceberg” y que podría haber “infectado” a otras áreas municipales. De ahí la reacción del Tesorero que podría extenderse a otros departamentos y servicios municipales.

El alcalde presiona para que el Tesorero dé marcha atrás
Según ha adelantado el diario ‘Sur’, el regidor naranja está intentando que esta situación se revierta y habría enviado una circular al Tesorero para que “con carácter inmediato” modifique sus decisiones y el Ayuntamiento vuelva a la normalidad económica.

Y es que como se comentaba al comienzo de la noticia, los archivos y carpetas encontradas, 800 gigas, han causado estupor, mucho más cuando los concejales espiados están corroborando al perito judicial que las conversaciones o mensajes privados que han sido incautadas son reales y propios. Sigue la duda también de la causa de que la única edil no afectada por el posible espionaje pertenece al grupo del alcalde, Ciudadanos.

La cadena de denuncias judiciales que se esperan va a ser enorme ya que los distintos grupos de la oposición así lo han manifestado, pero también podrían hacerlo a título particular cada concejal e incluso trabajadores, ya que entienden que han atentado en el ámbito de lo personal, más allá de lo político o laboral.