A María Dolores de Cospedal le pide el cuerpo irse de la política, al menos eso es lo que la secretaria general del Partido Popular asegura a su círculo de íntimos. Le duele el ataque personal a su persona y, más, a su marido, el empresario Ignacio López del Hierro.
Lo cuenta este viernes la periodista Pilar Ferrer en La Razón, quien precisa que Cospedal tenía decidido irse el pasado verano, y que así lo confesó en cenas con amigos comunes en la costa andaluza: “Me pide el cuerpo irme a la vida privada”.
Cospedal resistió durante años la guerra fratricida contra la super poderosa vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, la avalancha del caso Gürtel y Bárcenas, pero ahora las cintas grabadas por el comisario Villarejo han conseguido llevársela por delante.
"No necesitábamos ni influencia ni dinero"
Le duelen el ataque a su persona y aún más al de su marido, Ignacio López del Hierro. “Ni yo necesitaba influencias, ni mi marido dinero”, le ha dicho Cospedal a un grupo de amigos en un café de Madrid.
La número dos del PP lo venía venir, desde que las cintas comenzaron a rodar. Sin embargo, “ella no supo frenarlas, rodeada de un equipo de aduladores que la engañaban a toca teja”, escribe Pilar Ferrer, que asegura que Cospedal se sentía protegida en la presidencia de la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, la de mayor influencia.
