El gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha dado un giro de 180 grados en su discurso sobre a quién corresponde la gestión la epidemia de coronavirus. Después de calificar al Gobierno como "mando único dictatorial" cuando pretendía aprobar el estado de alarma a considerar "necesario y urgente que se implique" para hacer frente a la segunda ola de contagios.

"Sin poner ningún tipo de medidas están lastrando las economías de los más vulnerables que vienen de otros países huyendo de la miseria y de la pobreza”, dijo la presidenta madrileña en la sesión de control del Pleno de la Asamblea de Madrid, el 14 de mayo. Un momento en el que acusaba al Gobierno de perjudicar a la Comunidad por no permitir su avance en las fases de desescalada, según recuerda hoy la SER.

"El Gobierno está aprovechando la mayor crisis que ha tenido España para imponer un mando único dictatorial, y esperen que la gente salga a la calle porque lo de Núñez de Balboa les va a parecer una broma", señalaba entonces la presidenta Ayuso.

"No comparto el estado de alarma"

Para criticar el estado de alarma afirmó que el Gobierno podía recurrir a evitar los movimientos entre comunidades autónomas y que los gobiernos regionales gestionaran con autonomía la pandemia, "algo que no tenemos en ese momento. Es algo que no comparto, que no hay motivo para ello", decía sobre el estado de alarma.

Aguado pide la "implicación" del Gobierno

El vicepresidente del Gobierno madrileño, Ignacio Aguado, por su parte, incitó a Sánchez el 18 de mayo a elegir “elegir entre ERC o Cs”, mostrándose en contra de prorrogar el Estado de Alarma.

Este jueves, cuatro meses después, Aguado ha asegurado que “es necesario que el Gobierno de España se implique de manera contundente" porque “es absolutamente imposible acabar con una epidemia de estas características solo desde un gobierno regional".