Hablar en diferentes idiomas en el Congreso de los Diputados ya es casi una realidad. Este miércoles la Mesa ha fijado para el próximo martes día 19 de septiembre la fecha para la celebración del pleno en el que se someterá a votación la reforma del Reglamento para que se pueda utilizar las lenguas cooficiales -véase el catalán, euskera y gallego- en la actividad diaria de la Cámara Baja. Lo ha hecho después de examinar un informe de los letrados realizado para evaluar el encaje legal de este cambio tras la solicitud formal del PSOE y sus socios. Pero aunque haya que esperar al sufragio parlamentario en el propio pleno del martes ya se podrán empezar a hablar estas lenguas junto al castellano en el Hemiciclo, donde ya se pondrán en marcha los primeros medios para la traducción simultánea.

Las lenguas cooficiales llegan al Congreso

Tras semanas de incertidumbres e incluso de embistes por parte de la derecha, especialmente el Partido Popular, las lenguas cooficiales van a ser parte normal de la actividad parlamentaria. Este miércoles, la presidenta del Congreso, Francina Armengol, no solo ha puesto fecha a la votación de la reforma del reglamento que rige en la Cámara Baja sino que también ha aprobado una resolución para que se puedan usar las lenguas cooficiales desde este mismo pleno. Así, será el próximo martes 19 de septiembre cuando los grupos parlamentarios comiencen un debate y tengan que pronunciarse sobre esta modificación, que forma parte del compromiso de la propia dirigente al tomar posesión de su cargo para incorporar el catalán, el euskera y el gallego al día a día de la institución, tanto de forma hablada como escrita.

De esta forma, en su reunión de este miércoles, la Mesa ha calificado la propuesta de modificación del Reglamento que presentaron todos los grupos favorables a una investidura de Pedro Sánchez, como son el PSOE, Sumar, ERC, PNV, Bildu y BNG, y han dado su visto bueno a que continúe con los trámites tras analizar la resolución del informe de admisión que han realizado los servicios jurídicos para estudiar su encaje en la legalidad. La iniciativa fue presentada a principio de mes con la rúbrica de estas formaciones menos Junts per Cataluña, pero aunque no ha rubricado esta solicitud sí tiene previsto apoyarla. De hecho, esta modificación era precisamente una de las condiciones de los independentistas catalanes de Junts y ERC en el marco de las negociaciones y los "hechos comprobables" para dar su "sí" a Armengol como presidenta.

Desde el mismo pleno del 19 de septiembre

Sin embargo, la novedad es que aunque va a ser sometida a votación, desde el mismo pleno del próximo martes podrán ser utilizadas las lenguas cooficiales gracias a una resolución firmada por la propia presidenta para permitir que los diputados que lo deseen ya se expresen en su idioma de preferencia. Para dar cobertura al reto que esto supone, de momento esta primera toma de contacto se hará de forma provisional con el uso de intérpretes que harán una traducción simultánea. Cabe destacar que este sistema ya funciona en el Senado desde hace cerca de veinte años después de su aprobación de forma paulativa. Los letrados de las Cortes han dado su visto bueno a este extremo aunque han dilatado su puesta en marcha de forma permanente a lograr más medios técnicos.

Los detalles más pormenorizados del proceso de implantación que va a llevarse a cabo en el pleno del martes se conocerán este jueves, cuando la Junta de portavoces de todos los grupos tiene previsto reunirse por primera vez en esta legislatura. En este cónclave, los representantes de las fuerzas parlamentarias serán informadas sobre los puntos del debate para la reforma, que comenzará el 19 y proseguirá el 21 de septiembre. Se trata de tan solo unos días antes del intento de investidura del candidato del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, fijado para los días 26 y 27 de septiembre, así coo justo antes de la gran manifestación del PP en contra de la amnistía. Así, también se podrán escuchar los diferentes lenguajes que existen en la nación en la votación para hacer presidente o no al dirigente popular.

Una esperable mayoría absoluta

En términos de números, esta reforma necesita lograr la mayoría absoluta de mínimo 176 escaños ya que el Reglamento del Congreso cuenta con tipificación de ley orgánica, pero todo parece apuntar a que finalmente va a contar con 178 de todos aquellos que respaldaron la candidatura de la ahora presidencia Armengol el pasado 17 de agosto. Además, este cambio -que tiene en su contra al PP y a Vox- se planteó con una tramitación por lectura única, por lo que una vez ha pasado el primer examen de su toma de consideración, únicamente se pueden presentar enmiendas a la totalidad. Es decir, solo se necesita un único pleno para que vea la luz de forma oficial. A partir de ese momento se abre un espacio de seis meses para ultimar todos los medios necesarios para poder presentar cualquier escrito en cualquiera de estas lenguas cooficiales.