Con el ataque a la revista El Jueves, Vox continúa su estrategia de acoso y derribo a los medios de comunicación, como lleva haciendo desde su llegada a la política en el año 2017. Desde entonces, no ha parado de insultar y vetar a los periodistas críticos con el partido, hasta el punto de señalarles públicamente e incluso prohibirles acceder a sus actos.

Ricardo Rodrigo Amar, presidente del grupo editor de la revista satírica, es el último de una larga lista de personas y grupos de comunicación que la formación de ultraderecha ha puesto en el centro de la diana de todas las críticas de sus simpatizantes, también en las redes sociales.

Los medios de comunicación

Todo comenzó en 2019, cuando el partido de Santiago Abascal redactó en su primera legislatura en el Congreso un documento con órdenes para vetar a medios ya que, según dijeron entonces, "no son medios de comunicación ni periodistas, sino activistas". "Solamente hablarán mal de nosotros, porque somos su enemigo", decía un texto enviado al grupo de WhatsApp de la formación.

Entre ellos estaban Público, eldiario.es, La Marea, El Plural, El Español, Infolibre, Ctxt, El Mundo (con la exclusión expresa de Álvaro Carvajal y Javier Negre) y El País. También aparecían dos programas de televisión: Todo es mentira (Cuatro) y El intermedio (La Sexta), el latenight dirigido por El gran Wyoming. 

Más tarde se añadió a otros medios a la lista negra, como La Cadena Ser, Onda Cero, el Huffinton Post, Newtral, Cuatro y laSexta, cadena que los ultras defendieron en varias ocasiones que había que cerrar. También otro programa, Los Desayunos de TVE.

La formación de Abascal no se ha cortado ni ante la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), a quienes han acusado de ''cloaca'' por defender a los profesionales de la comunicación en varias ocasiones. ''Si queréis defender al periodismo, empezad por perseguir las mentiras de quienes prostituyen el periodismo dedicándose al activismo y a la manipulación'', atacó el grupo de ultraderecha en un tuit

Los periodistas

Desde Vox no solo han vetado a medios de comunicación, también a periodistas. Macarena Olona se refirió en el Congreso a Antonio García Ferreras y Ana Pastor como “la Gestapo que vigila la verdad oficial”. También han apuntado desde la formación de ultraderecha a Susanna Griso, Carme Chaparro, Jorge Javier Vazquez, Àngels Barceló, Julia Otero o Diego Losada, a quienes han llamado ''progres'' y ''activistas''. 

Sin embargo, fueron más allá. Durante su congreso en Vistalegre en 2019, se proyectó un vídeo en el que mostraban imágenes de periodistas. En él aparecían Jordi Évole en El hormiguero, Pablo Simón (politólogo), Laura Rosel (TV3), Ana Pastor y El objetivo (laSexta), Javier Ruiz (Cuatro), Ferreras en Al rojo vivo, Andreu Buenafuente en Late Motiv, Cristina Pedroche en Zapeando, Cristina Pardo o Iñaki Gabilondo, entre otros.

En la proyección en Vistalegre se escucharon gritos de ''fuera''. Sin embargo, no es la primera vez que los simpatizantes de Vox insultan a un periodista. Una de las últimas ha sido a Marta Maldonado, redactora de La Razón, quien denunció este mes de marzo el acoso que sufrió durante un mitin de la formación en Sevilla, donde algunos asistentes la calificaron de ''puta'' y ''zorra''. 

El Plural, vetado

El veto comenzó en 2019, con la publicación de un mensaje que Vox difundió en un grupo de WhatsApp con periodistas. El vicesecretario de Comunicación, Manuel Mariscal, escribió: “Cuando nos preguntes por el debate (aunque sea off the record), trasladamos nuestro gran cabreo porque íbamos a ganar ese debate. Nada de decir que nos viene bien”, en referencia a la prohibición de la Junta Electoral de participar en el debate organizado entonces por Atresmedia.

ElPlural.com decidió publicar este texto difundido por error, como también hizo Onda Cero. Minutos más tarde, los redactores de ambos medios fueron eliminados del grupo. En ese momento comenzaron las descalificaciones a este medio y su colaborador José María Garrido, prohibiéndole  la entrada en sus actos políticos o dejando sin respuesta preguntas formuladas por nuestros periodistas.

Meses más tarde, Abascal tuvo que responder sobre el veto contra varios medios en el Congreso a este periódico, al que calificó de "activista de la extrema izquierda".  “Es totalmente constitucional'', aseguró.

El líder de Vox insitió en el veto. Aseguró que, pese a recibir subvenciones públicas y ser un partido de representación nacional, no tienen la obligación de atender a la prensa: “No permitiremos la mentira ni el cordón sanitario contra Vox”.