La periodista Julia Otero ha cargo contra Vox y el papel que está jugando en Castilla y León en un contexto marcado por las protestas contra su vicepresidencia tras la crisis de la tuberculosis bovina. La periodista ha comenzado su programa, Julia en la Onda, recordando que 11 policías y al menos, un manifestante, resultaron heridos en el altercado que se vivió a las puertas de la Delegación de la Junta de Castilla y León en Salamanca.

“Fue la manifestación de un grupo de ganaderos, no todos, un grupo, los de la Unión por la Ganadería, que acabó con el intento de asalto violento, un poco al estilo trumpista”, subrayaba la periodista. De esta forma, la presentadora del programa explicaba que los manifestantes protestaban contra las medidas sanitarias que la ley española y europea había obligado a proceder ante la crisis tuberculosis bovina.

Osea, que se engañó a los ganaderos y un grupo de estos inició esta protesta ante el silencio de Mañueco

La Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta, en manos de Vox, les había prometido a los ganaderos relajar estos protocolos de control, algo que no han cumplido porque antes tendrían que poner el foco en atender a las reses enfermas con objeto no contar a las de otras provincias libres de tuberculosis.

En segundo lugar, Julia destaca la seguridad alimentaria de los consumidores. “Osea, que se engañó a los ganaderos y un grupo de estos inició esta protesta ante el silencio de Mañueco, el presidente, que no quiere incomodar, se supone, a su socio de Gobierno”, dice en su programa.

Crisis de tuberculosis bovina

Las palabras de Julia contra la formación política de Santiago Abascal se enmarcan en la crisis de tuberculosis bovina. Esta enfermedad del ganado vacuno se controla cada año a través de pruebas veterinarias o saneamientos a los animales que se encuentran dentro de las inmediaciones de los establecimientos ganaderos.

En el caso de que uno de los animales diera positivo en esta dolencia, según dicta la normativa, es obligatorio sacrificar a la vaca en el matadero para vender su carne, pero no se puede utilizar para cría de animales, según recoge el diario digital Público.es. Sin embargo, la Consejería de Agricultura y Ganadería de Castilla y León, gestionada por Vox, ahora busca saltarse esta normativa a consecuencia de su negacionismo sanitario tras su última publicación del 15 de mayo.

Negacionismo sanitario

Este texto recoge una resolución contraria a la normativa española y a la europea. Como consecuencia, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha suspendido la aplicación de esta norma que Vox había prometido a los ganaderos pasando todas estas competencias al Ministerio de Agricultura con una orden ministerial para limitar el movimiento del ganado.

El mundo rural se ha pronunciado ante lo ocurrido reaccionando con indignación contra la nula gestión del vicepresidente García-Gallardo. Ganaderos de Salamanca y veterinarios temen represalias por parte de Bruselas bajo la Administración de Mañueco-Gallardo.

Desde la Abogacía del Estado consideran que esta ley vulnera normativas superiores, la europea y la española, y un peligro para la reputación de la cabaña ganadera y la exportación de sus productos. La Junta de Castilla y León ha aceptado esta resolución y ha comentado un nuevo retroceso de sus políticas. Sin embargo, no se trata de una novedad que el gobierno castellanoleonés del PP y Vox falte el respeto a la normativa estatal y europea.

Los más sonados fueron la eliminación del SERLA, servicio de mediación laboral de Castilla y León, el intento de acallar a los sindicatos ofreciendo una subvención millonaria ilegal o el ataque a los derechos de la mujer, a las que se pretendía obligar a escuchar los latidos del feto antes de abortar.