El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mantenido una conversación telefónica con su homólogo ucraniano, Volodomir Zelenski, en la que ha aprovechado para trasladarle todo el apoyo de España en la defensa de la soberanía de Ucrania. Todo ello, después de que Donald Trump y Vladimir Putin desempolvasen el teléfono rojo y acordasen la búsqueda de una "solución política" y "negociada" al conflicto. "Una guerra injusta no puede terminar con un acuerdo de paz injusto", rezaba el mensaje de la red social X donde informaba el jefe del Ejecutivo de los avances y precisaba que Ucrania "puede seguir contando con España".
"Este apoyo va más allá de las palabras, como hemos demostrado en estos últimos tres años. Europa seguirá apoyando la aspiración de Ucrania a una paz justa y duradera. Ucrania quiere la paz y Europa quiere la paz", ha añadido Sánchez en su mensaje, mientras que el presidente ucraniano informaba hacía lo propio para agradecer a Sánchez el apoyo de España a Ucrania.
Acabo de hablar con el presidente @ZelenskyyUa a quien he trasladado todo mi apoyo en la defensa de la soberanía de su país frente a la agresión ilegal, injusta e injustificada de Rusia. Ucrania puede seguir contando con España.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) February 13, 2025
Este apoyo va más allá de las palabras, como hemos…
Asimismo, Zelenski le ha informado a Sánchez sobre la conversación con Donald Trump, precisando que ha servido para "aportar mayor claridad sobre cuestiones clave" en el marco de la invasión rusa. Así, el presidente ucraniano ha resaltado que en su país se fomentará su cooperación no sólo con Estados Unidos, sino también "con toda Europa". "La seguridad es una responsabilidad compartida. Agradezco a España que podamos contar con su apoyo en los esfuerzos políticos y diplomáticos para fortalecer la seguridad en Europa", remató.
En consecuencia, el máximo mandatario del país agredido ha abordado con Sánchez nuevas formas de ahondar en la cooperación "para apoyar a los ucranianos y fortalecer aún más los lazos entre Ucrania y España". Frente a esa colaboración, el compromiso de Moscú y Washington para retomar "de inmediato" este diálogo, tal como expuso el propio Trump, que incluso dio por hecha una futura reunión y planteó Arabia Saudí como posible escenario. Sin embargo, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha matizado ante los medios que "los detalles (del encuentro" aún deben tramitarse".
El teléfono rojo
Y es que el miércoles, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciaba en su plataforma Truth Social que mantuvo una “larga y altamente productiva conversación” con su homólogo ruso, Vladimir Putin. Este anuncio, realizado en plena tensión diplomática por la guerra en Ucrania, cristalizó el cambio en el enfoque de la Casa Blanca hacia la paz, apartándose del multilateralismo promovido por la OTAN durante las últimas ocho décadas.
La conversación telefónica, que duró unos 90 minutos, abordó diversos temas. Sin embargo, el centro del debate fue la situación en Ucrania. Trump elogió el papel de Putin y destacó su voluntad para negociar, lo que, según el magnate, podría llevar a una “conclusión exitosa” del conflicto. Además, se trataron asuntos relacionados con Oriente Medio, el poder del dólar y la inteligencia artificial, temas que reflejan la amplitud de la agenda tratada entre ambos mandatarios.
El anuncio de Trump generó reacciones inmediatas entre los aliados atlantistas. Algunos socios de la OTAN compararon esta conversación con los pactos diplomáticos que llevaron a la cesión de los Sudetes a Adolf Hitler antes de la Segunda Guerra Mundial, una analogía que subraya la preocupación por posibles concesiones unilaterales a Rusia.
Antes de que Trump hiciera públicas las declaraciones, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, había anticipado algunas condiciones trazadas por el expresidente para alcanzar la paz. Entre ellas, destacó que la restauración de las fronteras ucranianas previas a 2014 no sería considerada “realista”. También mencionó que la seguridad de Ucrania quedaría en manos europeas, debilitando el amparo que ofrece el artículo 5 de la OTAN. Por último, Hegseth dejó entrever que Ucrania no formaría parte de la Alianza Atlántica, una de las principales exigencias de los socios comunitarios.
El equipo negociador
Tras la conversación con Putin, Trump también se comunicó con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para informarle sobre los avances en las negociaciones. Aunque no se han hecho públicos todos los detalles del plan, Zelenski manifestó su disposición a trabajar junto a Estados Unidos para garantizar una paz duradera y confiable. Pese a ello, las condiciones propuestas por Trump podrían limitar el margen de acción del líder ucraniano.
Posteriormente, Trump anunció al equipo negociador encargado de buscar una solución al conflicto. La delegación estará liderada por el secretario de Estado, Marco Rubio, y contará con la participación del director de la CIA, John Ratcliffe; el asesor de seguridad nacional, Michael Waltz; y el enviado especial para Oriente Medio, Steve Witkoff. La ausencia notable en este equipo es la de Keith Kellogg, general retirado conocido por su postura más firme frente a Moscú y su apoyo a sanciones más severas contra Putin.