El Secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, ha estado discutiendo planes de guerra en un grupo de chat encriptado en el que se encontraba un periodista dos horas antes de que el ejército bombardeara posiciones de los hutíes en Yemen. Toda esta información ha sido publicada por uno de los editores jefe de la revista The Atlantic y más tarde ha sido confirmada por la Casa Blanca.
El editor jefe de The Atlantic, Jeffrey Goldberg, ha publicado un artículo este lunes en el que ha escrito como fue, erróneamente, añadido a un chat grupal de la aplicación comercial Signal -una app de mensajería instantánea basada en la privacidad y seguridad-, por Michael Waltz, consejero de seguridad nacional.
Esto ha supuesto una enorme violación de la inteligencia de seguridad nacional estadounidense. No solo había un periodista incluido en el grupo de forma inadvertida, sino que, además, la conversación sobre estrategias militares estaba teniendo lugar fuera de los canales seguros que el gobierno estadounidense usa regularmente para discutir planes de guerra clasificados y altamente sensibles.
Según ha escrito Goldberg, pudo seguir la conversación entre altos cargos del equipo de seguridad nacional de la administración Trump durante los dos días previos a los bombardeos en Yemen. En el grupo estaban también incluidos el vicepresidente, J. D. Vance, y el Secretario de Estado, Marco Rubio.
A las 11:44 del 15 de marzo, Hegseth publicó en el chat los “detalles operativos de los próximos ataques contra Yemen, incluida información sobre los objetivos, las armas que Estados Unidos usaría y la secuencia de los ataques”, a escrito Goldberg. “Si la información que contenía este mensaje hubiera sido leída por un adversario de Estados Unidos, podría haber sido utilizada para perjudicar al personal militar y de inteligencia estadounidense, especialmente en Oriente Medio”.
En una entrevista, el redactor jefe dijo que: “hasta el mensaje de Hegseth del sábado, se trataba principalmente de mensajes de procedimiento y política. Luego de planes de guerra, y para ser honesto, eso me dio un escalofrío por toda la espalda”. En su artículo, Goldberg no ha publicado ningún detalle sobre los planes que se discutían. Según ha explicado, Hegseth escribió que “las primeras detonaciones en Yemen serian en torno a la 1:45 p.m.” por lo que el periodista decidió esperar. “Si los mensajes son reales, los objetivos hutíes pronto serán bombardeados”, añadió.
Según oficiales del Pentágono, alrededor de la 1:55, los primeros ataques impactaron contra edificios en los suburbios de Sana, capital de Yemen, un conocido bastión de líderes hutíes. Los ataques continuaron a lo largo del sábado y los días siguiente.
Reacciones del Gobierno
Numerosos oficiales del Departamento de Defensa han expresado su sobresalto al conocer que Hegseth haya estado discutiendo estrategias militares estadounidenses a través de un chat grupal en una aplicación de uso comercial. Algunos señalan que mantener este tipo de conversaciones mediante un grupo de Signal puede suponer la violación del Acta de Espionaje, una ley que protege la información clasificada del gobierno.
Además, “la revelación de planes militares antes de llevar a cabo los ataques significa poner a las tropas estadounidenses en peligro”, dijeron los oficiales. Algunos antiguos funcionarios del FBI que trabajaron en casos de filtraciones han descrito esta situación como "una violación devastadora de la seguridad nacional". Destacan, además, que, si estas conversaciones han tenido lugar en los teléfonos personales de los participantes, el comportamiento podría ser aún más reprochable por el temor a los recientes intentos de hackeo por parte de China.
El senador Jack Reed, de Rhode Island, demócrata de mayor rango en el Comité de las Fuerzas Armadas, ha declarado que este asunto “representa uno de los fallos más atroces en la seguridad y sentido común que haya visto”. “Las operaciones militares deben llevarse a cabo con la mayor discreción y precisión, utilizando líneas de comunicación seguras y aprobadas, porque hay vidas estadounidenses en juego”, ha añadido.
Negacionismo en la Casa Blanca
Los miembros del Partido Republicano se han tenido que enfrentar a numerosas preguntas al respecto. Muchos han dicho estar preocupados por la situación, pero que esperarían ha poder leer un informe completo antes de juzgar concretamente la situación. El presidente de la Cámara de Representantes estadounidense y miembro de los republicanos, Mike Johnson, ha descartado la idea de poner en marcha investigaciones adicionales o de imponer medidas disciplinarias a los funcionarios implicados. “Me han dicho que están haciendo una investigación para averiguar cómo se añadió ese número [al chat], y eso debería ser todo”, ha explicado Johnson a los periodistas en el Capitolio refiriéndose a los funcionarios de la Casa Blanca. “No estoy seguro de que requiera mucha atención adicional”.
Por su parte, Donald Trump, ha dicho en una rueda de prensa en la Casa Blanca que no tenia constancia del articulo de The Atlantic. “No se nada de ello”, dijo, y añadió: “Me estoy enterando por primera vez”. El Pentágono ha remitido las preguntas sobre el artículo al Consejo de Seguridad Nacional. Tras aterrizar en Hawái previamente a un viaje diplomático por Asía, Hegseth fue asaltado por la prensa y calificó a Goldberg de “supuesto periodista” y, tras ser presionado, dijo que “nadie estaba enviando estrategias militares” que no haría más comentarios al respecto.