El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reclamará que la situación de Venezuela y la postura europea sea debatida en la próxima cumbre comunitaria de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará en Bruselas el 17 y 18 de octubre. La voluntad del jefe del Ejecutivo es que la solución a la crisis se incluya en el orden del día como tema prioritario, haciendo del debate multilateral el modus operandi para elevar la discusión y alcanzar un quórum de los Veintisiete.
El encargado de realizar este anuncio ha sido Fernando Sampedro, secretario de Estado para la Unión Europea. Desde la capital comunitaria, el dirigente ha explicado que la cumbre supone una “oportunidad” clara para abordar la situación en Venezuela, responder a Nicolás Maduro, sentar las bases del asilo a Edmundo González concedido por España y generar doctrina en la UE.
Por el momento, se desconoce qué postura adoptaría el presidente del Gobierno si finalmente Venezuela acaba formando parte de la agenda de la cumbre. No obstante, España ha jugado un papel fundamental en los últimos acontecimientos sobrevenidos tras la celebración de las elecciones: desde el asilo a Edmundo González, con un importante papel librado por el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez-Zapatero y el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, hasta por el Ejecutivo en su conjunto, fuertemente vilipendiado tanto por la derecha, que acusa a Moncloa de favorecer el Golpe de Estado de Nicolás Maduro, como por sus habituales socios en el Congreso de los Diputados, quienes muestran sus dudas sobre la postura española.
Esta posición de “liderazgo” ha sido defendida por el propio Sampedro, quien ha recordado que el debate sigue en un estadio “muy preliminar” pese a que España ya lideró una propuesta para que la crisis política en Venezuela fuera discutida a nivel de ministros de Exteriores de la UE: "Queremos elevar la discusión a nivel de líderes y que la Unión Europea pueda tomar una posición para colaborar en que se pueda dar una solución", ha zanjado el secretario de Estado.
El pasado mes de agosto, Albares ya llevó la cuestión a una reunión de ministros de Asuntos Exteriores europeos en la que el ministro pidió que la Unión Europea estudie "herramientas" para propiciar un diálogo interno entre Caracas y oposición que permita una "solución negociada, pacífica y genuinamente venezolana". La reunión concluyó con la decisión de los 27 de no reconocer la legitimidad del presidente venezolano, Nicolás Maduro, tras una discusión en la que España planteó al resto de socios europeos la opción de aplicar sanciones contra el régimen, aunque esta posibilidad no cuenta con la unanimidad de los socios.
Sánchez, en la Asamblea General de la ONU
El debate multilateral no se reduce exclusivamente al conflicto en Venezuela. De hecho, el presidente del Gobierno se encuentra desde este lunes en Nueva York con motivo de la celebración de la Asamblea General de la ONU, donde ya tuvo la oportunidad de intervenir y de reunirse con António Guterres, secretario general del organismo, a quien trasladó su preocupación por los recientes bombardeos israelíes en Líbano.
Pedro Sánchez ha compartido en su cuenta de la red social X que fue un "placer reunirse de nuevo" con Guterres, con quien discutió no solo la situación en Líbano, sino también los conflictos en Gaza y Ucrania. Ambos líderes han hecho un llamamiento a la contención y a la desescalada, mostrando una fuerte preocupación por los acontecimientos actuales.
Durante la reunión, Pedro Sánchez ha reafirmado su compromiso con un sistema internacional que se sustenta en el multilateralismo, la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario. Esta postura refleja la determinación y coherencia del presidente en defender principios que fomentan la paz y la cooperación global.