El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro, desde Florida (Estados Unidos), se ha descargado de responsabilidad por el golpe de Estado en Brasil de este domingo por parte de asaltantes de extrema derecha que irrumpieron violentamente en las sedes de los tres poderes del Estado, de los cuales han sido detenidos varios centenares, según lo informado por las autoridades del país latinoamericano.

El mandatario saliente hasta hace apenas diez días, después de más de siete horas transcurridas desde el ataque a los edificios públicos del Congreso, el palacio presidencial y la Corte Suprema, ha alegado ahora que durante su mandato "siempre" ha cumplido con la Constitución, "respetando y defendiendo las leyes, la democracia, la transparencia y la sagrada libertad".

"Además, repudio las acusaciones, sin pruebas, que me atribuyó el actual jefe del Ejecutivo de Brasil", ha escrito el exdirigente ultraderechista en referencia a Lula da Silva a través de su perfil en Twitter. Asimismo, Bolsonaro ha calificado los hechos ocurridos este domingo como "saqueos e invasiones", asegurando que "escapan a la regla", ya que "las manifestaciones pacíficas, en forma de ley, son parte de la democracia".

El ministro de Justicia, Flávio Dino, ha afirmado que Bolsonaro es políticamente responsable de los ataques a las instituciones democráticas que han tenido lugar este fin de semana después de semanas de amenazas. "Políticamente está claro que, en la medida en que hubo una transición conflictiva y que no hubo reconocimiento del resultado electoral y, por el contrario, hubo una instigación a creer en esoterismo, exotismo, tesis extrañas o agresivas, está claro que la responsabilidad política es inequívoca", ha señalado como causa el cargo gubernamental en declaraciones a la cadena de televisión brasileña O Globo.

"La responsabilidad jurídica, obviamente, recae en el Poder Judicial, en el Ministerio Público. No veo, en este momento, ningún elemento de responsabilidad legal para el expresidente", ha precisado el titular de la cartera de Justicia, que ha agregado que puede "aparecer" responsabilidad legal para Bolsonaro, pero que ahora no la hay. Aun así, Dino ha reiterado que sí existe responsabilidad política: "Todos aquellos que quieran polarizar, instigar a la práctica de delitos o extremismos son políticamente responsables, por acción o por omisión".

Centenares de detenidos por el golpe de Estado en Brasil

Las autoridades brasileñas han informado de que han sido detenidos varios centenares de personas este domingo tras el asalto a las sedes de los tres poderes del Estado por parte de ultraderechistas simpatizantes de Jair Bolsonaro que reclamaban un golpe de Estado. El ministro de Justicia brasileño, Flávio Dino, ha explicado en un balance que hay "aproximadamente 200 personas detenidas", aunque continúan las labores por encontrar a los sospechosos.

Además, ha agregado que hay al menos 40 buses incautados "porque son instrumentos para perpetuar los delitos". "Ya identificamos todos los buses que fueron a Brasilia y todos los financiadores de esos buses", ha afirmado, según lo trasladado por el canal televisivo O Globo.

Por su parte, el gobernador del Distrito Federal de Brasilia, Ibaneis Rocha, ha señalado que "más de 400 personas ya han sido detenidas y pagarán por los delitos cometidos". "Seguimos trabajando para identificar a todos los demás que participaron en estos actos terroristas esta tarde en el Distrito Federal. Seguimos trabajando para restablecer el orden", ha agregado el mandatario regional.

Los sospechosos quedan ahora pendientes de una audiencia de custodia que decida sobre su detención definitiva, según lo publicado por O Globo. Los detenidos se encuentran en dependencias de la Policía Civil del Distrito Federal, concretamente en el Departamento de Policía Especializada, donde se espera la llegada de más sospechosos. La mayoría están siendo arrestados en base al artículo 359-M del Código Penal, que prevé entre 4 y 12 años de prisión por "tentativa de destitución de un gobierno legítimamente electo".