Las autoridades austriacas han extendido la medida que anunciaron este jueves y tras revelar que las dos regiones más afectadas por el repunte de coronavirus, Salzburgo y Alta Austria, entrarán en un nuevo confinamiento a partir del lunes, han decidido ampliar la decisión a toda la población del país, ante la imposibilidad de hacer frente al crecimiento de casos.
La norma arrancará el próximo lunes y, aunque estará vigente durante los próximos 10 días, el Gobierno austriaco no descarta que pueda prorrogarse durante los próximos 20 días, lo que dejaría la puerta abierta a que se elimine para antes de navidad.
Con los contagios de Covid-19 disparados, Austria volverá al confinamiento y también ha establecido como obligatoria la vacunación a toda la población para tratar de hacer frente a la pandemia, ya que el número de personas que han fallecido también está siendo muy elevado.
En el último día, el departamento sanitario austriaco revelaba un nuevo récord de positivos en coronavirus, con 15.145 nuevos contagios y 55 fallecidos. Algo que ha hecho que el Gobierno federal, dirigido por los conservadores (ÖVP), junto a Los Verdes, tome tal medida, ya que "no había otra alternativa".
El confinamiento durará unas tres o cuatro semanas y es una "oportunidad" para volver a la normalidad. Mientras esté en vigencia, solo podrán abrir los supermercados, las farmacias y las tiendas, mientras que los restaurantes, cafés y bares cerrarán. En este sentido, los ciudadanos solo podrán salir a la calle por cuestiones urgentes o por razones médicas, también para hacer ejercicio o ir al trabajo.
Una norma que, aunque estaba prevista para que se tomara en las regiones con mayor tasa de incidencia, el Consejo Nacional ha terminado aplicándola a todo el territorio. La incidencia sigue disparándose y en las últimas horas la tasa registrada ya se sitúa en los 989 casos por cada 100.000 habitantes.
