El expresidente del Gobierno, José María Aznar, ha comparecido este martes en la comisión de la caja B del Partido Popular. Se esperaba con la mayor de las expectaciones los duelos entre Aznar y Gabriel Rufián y Aznar y Pablo Iglesias. La conversación con el diputado de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ha estado marcada por la acusaciones mutuas de “golpistas”, mientras que la batalla con el líder de Podemos ha estado regida por la tensión.

El secretario general de Podemos comenzó su intervención preguntando a Aznar si “conocía las escuchas del caso Naseiro”, ante lo que el expresidente ha asegurado que no. “Cuando tuve el conocimiento, cree una comisión de investigación interna”, ha argumentado, y ha añadido irónicamente que “podía haber convocado una consulta”. “Le recuerdo que esto se está grabando y no puede mentir en esta comisión”, le ha espetado Iglesias. “Debe usted también respetar la verdad si quiere ser una persona respetable”, le ha contestado Aznar.

El expresidente del Gobierno ha insistido en que no conocía a Francisco Correa a pesar de que pagó la iluminación y el sonido de la boda de su hija y Alejandro Agag. En este punto, Iglesias ha mostrado su extrañeza y el exlíder del PP ha reaccionado hablando de la vida privada del líder morado: “Mi simpatía por usted es perfectamente descriptible, me parece un peligro para las libertades democráticas. Familiarmente ha pasado por unos momentos muy difíciles y le deseo lo mejor. Pero le tengo que decir que sobre los regalos de la boda de mi hija no voy a hablar”.

“Usted es el expresidente de mi país y la imagen que ha dado usted en esta comisión es una vergüenza para mi país. Trabajaré para que nadie se tenga que avergonzar de tener expresidentes como usted”, ha concluido Iglesias.