Situado en el elitista municipio madrileño de Pozuelo de Alarcón, el Campus de Somosaguas es una especie de isla completamente ajena a lo que ocurre en la capital. Allí se encuentra la facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid. A quien la visita por primera le cuesta trabajo creer que en la Comunidad de Madrid -gobernada desde hace más de veinte años por el Partido Popular y utilizada como campo de ensayo de todo tipo de políticas neoliberales-, pueda existir un espacio tan nítidamente de izquierdas.

A estas alturas, ya nadie duda que el germen de Podemos tuvo lugar en Somosaguas. Pero la facultad de Ciencias Políticas de Madrid ha estado en el origen de muchos más movimientos sociales y políticos que marcan la actualidad política española.

Aquí se produjeron los primeros escraches en nuestro país. El primero tuvo lugar en octubre de 2010, cuando decenas de alumnos -bajo la atenta mirada de Pablo Iglesias-, mostraron tarjetas rojas a Rosa Díez bajo la consigna  de “fuera fascistas de la Universidad".

Un año más tarde, la táctica fue perfeccionada cuando un nutrido grupo de alumnos interrumpieron la clase de Moral Santín,  profesor de la facultad, dirigente de IU y exconsejero de Bankia. En ambos casos, las imágenes fueron grabadas y difundidas por la red, dando origen al cuestionado concepto de protesta.

Muchos años antes de que los escraches ocuparan las portadas de los principales periódicos, y que lo sufrieran políticas como Manuela Carmena o Begoña Villacís, la facultad de Ciencias Políticas también estuvo en el centro de las primeras “movilizaciones en red” que tuvieron lugar en España.

El 13 de marzo de 2004, y ante un Partido Popular que se empeñaba en ocultar la verdadera autoría de los terribles atentados de Atocha, muchos profesores de la facultad alentaron y secundaron la desobediencia civil en la jornada de reflexión electoral. De aquellas protestas que se difundieron por mensajes de texto bajo el mandato del “Pásalo” queda un libro escrito (13-M. Multitudes on line) en el que un grupo de docentes se “autoinculpa” de la organización y convocatoria de manifestaciones frente a las sedes del PP. Entre los firmantes figura Ariel Jerez, uno de los principales ideólogos de Podemos.

En gran parte el 15-M también guarda conexión con la Facultad de Ciencias Políticas de Madrid. El movimiento que ocupó la puerta del Sol no es más que la prolongación de las Asambleas que durante años se llevaban celebrando en Somosaguas bajo el paraguas de Contrapoder, la asociación que fundaron Pablo Iglesias e Iñigo Errejón (jefe de estrategia política y responsable de campaña) a imagen y semejanza de los centros sociales italianos. Uno de los principales inspiradores del 15-M es el profesor Juan Carlos Monedero, quien muchas veces define al movimiento que se inició en Sol como “la Universidad en Plaza”.