Alonso Aznar, hijo pequeño del expresidente del Gobierno José María Aznar y la exalcaldesa de Madrid Ana Botella, se ha visto envuelto en un problema judicial en Ginebra (Suiza) tras cometer una "infracción grave" de tráfico. El joven Aznar fue pillado a 87 kilómetros por hora en una zona donde había un límite de 50. Concretamente a la altura del número 48 de la avenida Louis Casaï, de la ciudad helvética, tal y como reflejan los documentos judiciales.

En conversación con El País, el empresario se ha justificado así del delito que cometió hace dos años: “Llegaba tarde a un avión, tenía que devolver el coche de alquiler e iba más rápido de lo que debía. Metí la pata”, ha confesado un Alonso Aznar que ha pedido a sus abogados que recurran la decisión judicial alegando que el radar podría estar roto: "Igual iba a 50 km/h y la máquina está mal”, ha añadido al medio. A pesar de estas declaraciones, la Fiscalía suiza tiene la firma de Alonso Aznar reconociendo el delito y el pasado julio sus abogados mandaron una carta en la que reconocía “los hechos que se le imputan”.

Cabe destacar que el hijo pequeño de Jose María Aznar es directivo de una empresa en cuya junta directiva está su padre y ha cometido el delito en uno de los países más severos con las infracciones de su código de circulación. De hecho, a Alonso se le ha impuesto una multa económica “en función de la situación personal y económica del infractor”. En su caso, 13.800 francos suizos, casi 14.000 euros. Sin embargo, al no tener antecedentes no deberá pagarlo mientras no cometa ningún otro delito en los próximos tres años. Lo que sí tendrá que pagar son 2.760 francos (2.745 euros).

En caso de no hacerlo, el joven Aznar sería castigado con 12 días en prisión. Alonso Aznar ha soprepasado el límite en 30 kilómetros por hora. De haberlo superado en 40, podría acarrear penas entre 1 y 4 años.