La convocatoria de las elecciones generales ha modificado por completo el escenario que se había dibujado la noche del 28 de mayo. Con las Cortes ya disueltas se activa la marcha atrás para el 23 de julio y con ello una nueva reconfiguración de la hoja de ruta del PP en cuanto a los pactos para culminar su ola de victorias a nivel autonómico y municipal.

El PP sabe que uno de los motivos por el que Sánchez ha convocado elecciones es para acorralarle y retratarle junto a Vox. De hecho muchos de los pactos se van a producir entre el periodo preelectoral y la propia campaña. Es por ello que en el PP pretenden dilatar todo lo que sea posible las negociaciones con Vox para centrarse en "lo importante": echar a Sánchez.

Cada autonomía tiene sus propios plazos para formar gobierno en función de la constitución de las asambleas regionales. La primera fecha en la que los nuevos diputados se verán en el hemiciclo en la Comunidad Valenciana es el 26 de junio; en Aragón, el 23; en Murcia, el 14, y en Cantabria, el 22. En Extremadura y Baleares, donde el PP también tiene posibilidades de llegar a acuerdos con Vox el plazo acaba el 27 de junio. A partir de ese momento comienza el plazo para formar los diferentes gobiernos autonómicos. Aproximadamente suele haber dos semanas de plazo para fijar un pleno de investidura. Sin embargo, si no hay acuerdo se puede dilatar hasta dos meses con el que el candidato solo necesita una mayoría simple para ser investido. Ejemplo de ello es Isabel Díaz Ayuso. En 2019 la suma con CS y Vox permitía que fuera elegida presidenta, pero no fue hasta mediados de agosto cuando pudo asegurarse los votos y ser investida presidenta. Es un margen ajustado, pero suficiente como para alejar de los mantras de la campaña de las generales los más que asumidos pactos con Vox.

De esta forma, primero se pactará el lugar de ambas formaciones en los siguientes parlamentos autonómicos y será después cuando se elija el reparto de asientos en los futuros gobiernos. Eso si Vox les deja. La formación de ultraderecha que marcará la política autonómica en buena parte de España puede ponerle las cosas difíciles a los de Feijóo y forzar hasta el último momento al PP para acelerar las investiduras. Por lo pronto se cree que la Comunidad Valenciana será rápida. Sin embargo, en regiones como Baleares o Extremadura la cosa irá para largo.

Para tomar las decisiones sobre los pactos con Vox Alberto Núñez Feijóo reune este martes a todos sus barones en Génova. La Junta Directiva Nacional analizará uno a uno las posibilidades, pero la dirección dejará libertad a cada una de las organizaciones territoriales cómo pactarán con Vox. Feijóo y su equipo simplemente analizará el panorama general, así como el margen con el que cuentan para alejar los órdagos que pueda lanzar Vox.

 En busca de una mayoría "clara y contundente"

Los pactos coincidirán paralelamente con la campaña electoral. Este lunes el presidente del PP comparecía en una declaración institucional celebrando su resultado electoral y en busca de trasladar ese resultado a las elecciones generales recién convocadas. Para ello pedía una "mayoría clara, incontestable y contundente para empezar un nuevo rumbo". "Quiero empezar esta comparencia dando las gracias" ha indicado sacando pecho de los resultados del 28 de mayo en una rueda de prensa.

Así, ha asegurado que el adelanto electoral es bueno ya que es "mejor cuanto antes", que los ciudadanos voten quién quieren que sea el presidente del Gobierno. "España dio ayer el primer paso para dar un nuevo ciclo político y convoco a todos a culminarlo que finaliza el 23 de julio. Convocar elecciones inmediatas no tapa el resultado del dia de ayer. Los españoles han dicho basta, hasta aquí hemos llegado", indicaba. 

Por ello, se ha vendido como "otra manera en el fondo y en las formas". "Solo hemos empezado. El sanchismo no ha sido derogado todavía. España está convocada a hacerlo en 54 días y es ahí cuando debe expresar con nitidez qué camino quiere", expresaba Alberto Núñez Feijóo desde la sede nacional de Génova. Así, ha pedido "desde ya una mayoría clara, incontestable y contundente para empezar un nuevo rumbo. Debemos dejar atrás cinco años para olvidar".

Para Feijóo, el Ejecutivo es "un modelo agotado que debe agotarse para siempre". "La españa que ha soportado este lustro de sanchismo no pueden permitirse cuatro años más. Los que proponen una legistarura más de lo mismo debemos responderle con los mismos en las urnas", insistía animando a la movilización descartando que no ha recibido ninguna llamada del PSOE y que ha felicitado a Emiliano García Page y que espera hacerlo en las próximas horas con Adrián Barbón.