A partir de este viernes las caras de los candidatos a las diferentes comunidades y municipios vestirán las calles de todas las autonomías y localidades de España en el sprint final hacia el 28M. Así las cosas, a las 00:00 horas de hoy jueves para mañana -a veces antes- las formaciones despegarán sus lonas por farolas y paredes. Algunas de ellas, como si de estrellas de rock se tratase o de un musical de la Gran Vía que a estas alturas no necesita anuncio, será lo primero que verán los vecinos cuando levanten la persiana desde este fin de semana y durante unos veinte días. En ElPlural.com hemos querido indagar un poco más en un hecho siempre curioso para saber quién y cómo regula qué partido ocupa qué sitio.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que el lugar escogido por cada formación no resulta baladí a la hora de repartirse los territorios -un poco más adelante se explica de qué manera se hace esto-. Por ende, lo normal es que en los barrios históricamente obreros o cuya clase socioeconómica se considera media-baja las fuerzas progresistas ganen por goleada, mientras que los pudientes  pertenezcan a la derecha.

Por lo tanto, de primero de política: todo en el ámbito está pensando y obedece a una estrategia. Echa un vistazo a lo largo de las próximas semanas y verás la diferencia palpable entre la cantidad de carteles del PP que cuelgan de las farolas del Barrio de Salamanca y en Vallecas. Lo mismo con PSOE, Más Madrid o Unidas Podemos. 

¿Qué dice la ley?

La normativa que regula este hecho es la Ley Orgánica 5/1985 de 19 de junio del Régimen Electoral General (LOREG), en sus artículos 55 y 56. El primero dicta que los ayuntamientos tienen que reservar lugares gratuitos para que se coloquen carteles en postes y farolas. Los partidos, por su parte, solo pueden pegarlos en estas zonas o en espacios comerciales autorizados.

Según el otro artículo de la misma ley, cada consistorio debe decir a la Junta Electoral de Zona cuáles son las calles disponibles, y esta es la que reparte el pastel entre las formaciones que se presentan. ¿Y quien tiene preferencia? También aparece regulado en este apartado: “Se distribuyen los lugares mencionados atendiendo al número total de votos que obtuvo cada partido, federación o coalición en las anteriores elecciones equivalentes en la misma circunscripción, atribuyéndose según las preferencias de los partidos, federaciones o coaliciones con mayor número de votos en las últimas elecciones equivalentes en la misma circunscripción”.

También hay que subrayar que no todos los carteles electorales se enmarcan dentro de la propaganda gratuita. En este sentido, los ayuntamientos habilitan asimismo zonas en las que las formaciones pueden comprar y colocar sus carteles o banderolas. El orden de prioridad en este caso es simple: el primero que contrate una campaña y la pague es quien tiene los derechos.

Otro aspecto a destacar es que la Junta de Zona no actúa de policía (o no del todo). Es decir, no está detrás de los partidos para ver si han respetado con lo estimado, sino que de limita a investigar las denuncias interpuestas por los ciudadanos y los grupos políticos, para después notificárselo a los segundos en caso de fraude.

Más entresijos de la cuestión, ya para los más curiosos: el Consistorio tampoco vigila si se cumple la normativa ni los partidos tienen la obligatoriedad de ocupar todos los espacios reservados para ellos, sino que pueden elegir la zona y, si así quieren, actuar con la mala idea en un hipotético caso de quitar calles para que no puedan usarlas sus adversarios políticos. Es decir, no se regula qué espacios, sino cuántos. Pero, eso sí, existe una especie de norma no escrita en la que la calle de la sede (Génova, Ferraz...) está reservada a la del partido que juega en casa.

Dónde hace la “pegada de carteles” cada partido

Si se mantiene la vista en Madrid, lo anteriormente expuesto explica que los socialistas comiencen la pegada de carteles en la Plaza Raffaella Carrá de Chueca y que el lugar escogido para abrir anteriormente la campaña haya sido Parla. El papel de ambos lugares parece claro: mantener el conocido como cinturón rojo. Cabe destacar que Parla es uno de los grandes bastiones socialistas, ya que su Ayuntamiento ha estado siempre liderado por el PSOE salvo en 2015, única legislatura en la que el PP arrebató la gobernanza.

Más Madrid, por su parte, tira de orgullo vallecano y ha oficializado, según ha podido saber ElPlural.com, que llevará a cabo la pegada de carteles en la Plaza Vieja de Vallecas. La campaña electoral comenzará por su parte en el conocido popularmente como Parque de las Siete Tetas. Se trata de uno de los enclaves más bonitos de la ciudad para contemplar el skyline a vista de pájaro. Además, el sitio elegido conecta, como hiciera en 2021, con el espíritu verde que quiere trasladar la formación de Mónica García y Rita Maestre a sus votantes, convertido en punta de lanza de su programa.

Aún en la izquierda, Podemos y, en concreto Ione Belarra, realizará la “pegada” en el barrio de Orcasitas junto a los candidatos a la presidencia, Alejandra Jacinto; y a la alcaldía, Roberto Sotomayor. Según fuentes de la formación, el sitio escogido es “un enclave histórico y pionero en cuanto a participación ciudadana y movimientos asociativos por el derecho a la vivienda”.

Vox, por su parte, pegará los primeros carteles en Tetuán, lugar que acompaña el discurso de la formación ultraderechista contra la okupación. De hecho, lo hará en la calle Jaén, vía en la que el pasado fin de semana han tenido lugar sucesos relacionados con uno de los hechos que más espacio abarca en el discurso de los Rocío Monasterio u Ortega Smith.

Por último, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no llevará a cabo la pegada de carteles de forma oficial, mientras que la plaza escogida para comenzar la campaña es la de Felipe II, en pleno Goya, perteneciente a su vez al Barrio de Salamanca.