Basta con repetir una mentira para convertirla en realidad, a ojos de buena parte de la ciudadanía. Un área de la derecha y más aún de la extrema derecha comenzó el bulo de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, había dicho a los valencianos que “si quieren ayuda, que la pidan”. Nada más lejos de la realidad, las declaraciones del líder del Ejecutivo no fueron estas, sino las siguientes: “Si necesitan más recursos, que los pida”.
“No hace falta priorizar unos municipios sobre otros ni jerarquizar tareas. Se prioriza cuando faltan medios y ese no es el caso (…) No tiene que pasar. Por tanto, la Comunidad Valenciana, si requiere más efectivos -maquinaria, financiación o asesoramiento técnico-, lo que tiene que hacer es pedirlo y se lo suministraremos como lo estamos haciendo; inmediatamente”, pronunciaba el líder de Moncloa el pasado 2 de noviembre.
Horas de tertulia con Pablo Motos e Iker Jiménez como máximos exponentes
Aunque las mentiras contra el responsable del Ejecutivo y el equipo de Gobierno en su conjunto han sido varias y reiteradas durante estos días; tanto que han ocupado horas y horas de televisión y han sido propagados muchas veces por los propios presentadores.
Casos evidentes de esto son Iker Jiménez o Pablo Motos, y es que si el segundo decía en prime time la pasada noche la frase que Sánchez nunca pronunció y con la que comienzan estas líneas, el conductor de Horizonte llegó a sostener que había “muchos cuerpos” en el parking de Bonaire antes de demostrarse que no había ningún cadáver en este espacio.
En las tertulias, más de lo mismo, hasta el punto de llegar a justificar las agresiones al líder del Ejecutivo en Paiporta el pasado domingo. Algún tertuliano emitió que las imágenes de coche del presidente con los cristales rotos obedecían a una estrategia de Moncloa para victimizarse.
Del “ataque de Marruecos” a las evacuaciones
Las mentiras alrededor del peor temporal que se recuerda en la historia reciente de nuestro país han sido habituales desde al pasado martes coincidiendo con la jornada más catastrófica de la DANA.
Las mentiras han abarcado desde teléfonos falsos ante una falsa saturación de los servicios de emergencia hasta la oportunidad de dar rienda suelta al racismo. En este último sentido, se llegó a decir durante las primeras horas que la DANA de Valencia había sido resultado de un “ataque meteorológico de HAARP” liderado por Marruecos. Esto, evidentemente, era rotundamente falso, dado que este proyecto científico, de origen estadounidense, no tiene ninguna capacidad para alterar las condiciones meteorológicas.
Asimismo, se extendió la idea de que los efectivos de rescate habían dado orden de evacuar algunos municipios, lo que provocó en muchos casos el caos. Esto nunca llegó a suceder.
Como tampoco sucedió el desabastecimiento de agua potable o algunos productos básicos, pero la mentira empujó a que miles de ciudadanos se desplazaran desesperados a los supermercados y empresas distribuidoras para hacerse con determinados productos desesperadamente.
Y los bulos han seguido y persistido contra entidades oficiales como la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) o la Confederación Hidrográfica del Júcar, organización esta segunda de la que se llegó a decir que había pedido aliviar “agua del embalse de Forata abriendo sus compuertas”, por lo que los caudales tanto del río Magro como del Mijares “aumentarían de forma considerable”. Otra vez, falso.
Y hacia la AEMET, más allá de las acusaciones vertidas por algunos políticos, entre ellos el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se propagó también el bulo de que el radar de lluvias no funcionaba en los momentos previos de la catástrofe y que, por eso, no se predijo la situación que estaba a punto de producirse. Esto, obviamente, es mentira; y es que la AEMET envió hasta siete alertas a las que en este caso el president de la Generalitat Valenciana no atendió.
Estos son solamente algunos de los bulos, pues en los últimos días se han propagado muchísimos más.
La extrema derecha aprovecha la indignación
Cabe destacar que hay quien, aprovechándose de la situación actual, no solo esparce informaciones falsas, sino también odio.
Es el caso de la ultraderecha y, hasta el momento, el ejemplo más evidente de esto ocurrió en Paiporta el pasado domingo, cuando grupos organizados trataron de agredir a los reyes Felipe VI y Letizia, el president de la Generalitat y el del Gobierno. En su caso, algunos de los nombres que destacaron fueron los de Revuelta o Solidaridad, ambos afines a Vox; cuyos miembros, además,justificaron el ataque a Sánchez.
Es cierto que en la localidad fueron muchos los vecinos que mostraron su enfado, totalmente comprensible, ya que algunos de ellos lo han perdido todo. Pero tampoco es menos verdad que hay grupúsculos ultras que beben de ese caldo de cultivo para que el caos vaya a mayores.
De hecho, Vox ha llegado a decir que el Ejecutivo "oculta cientos de víctimas mortales". "El Gobierno está ocultando y escondiendo cientos de víctimas mortales (...) El Gobierno no ayuda a las víctimas y los familiares, teniendo a su disposición al Ejército", emitía este martes desde el Congreso el portavoz parlamentario, José María Figaredo, entrando también en el asunto de las competencias para cargar toda la culpa en el Gobierno.
