El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el jefe de la Oficina Económica de Moncloa, Álvaro Nadal. Foto: PP

 

 


La Oficina Económica de Moncloa trabaja contrarreloj desde hace varios días para preparar el nuevo cuadro de previsiones económicas que Mariano Rajoy ha prometido presentar en abril. En los primeros borradores, las cifras son más optimistas que las calculadas esta misma semana por el Banco de España. El objetivo marcado por Presidencia es armar un cuadro de previsiones que se sitúe entre el que figura en los Presupuestos del Estado, demasiado optimista, y el elaborado por el Banco de España, que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, considera demasiado pesimista.

Jarro de agua fría
Para lograr el objetivo de presentar un cuadro no muy pesimista, Mariano Rajoy ha vuelto a contar con su fiel servidor Montoro, al que ha encargado la elaboración de un argumentario que sostenga las nuevas cifras. En ese mismo sentido trabaja Álvaro Nadal, el jefe de la Oficina Económica de Moncloa, donde ha caído como un jarro de agua fría el informe del Banco de España que triplica el tamaño de la recesión prevista por el Gobierno para 2013. Mientras el cuadro incluido en los Presupuestos del Estado prevé una caída del PIB del 0,5% para el conjunto del año, el Servicio de Estudios del Banco de España asegura que la cifra no bajará del 1,5% al final del ejercicio.

Mantiene el 1% de caída
Tras ser preguntado en el Congreso por Alfredo Pérez Rubalcaba sobre si el Gobierno mantenía las previsiones económicas de 2013, algunos colaboradores de Mariano Rajoy comenzaron a filtrar la semana pasada que el nuevo cuadro contendría una bajada del PIB del 1%, es decir, el doble de la previsión inicial. Ahora, después de que el Banco de España haya puesto sobre la mesa la cifra del 1,5%, el Gobierno tiene que buscar nuevos argumentos para mantener su 1%, ya que según las fuentes consultadas por ELPLURAL.COM, Rajoy no tiene intención, al menos por ahora, de modificar ese objetivo del 1% de caída del PIB.

No hablar del paro
Una de las principales consignas del argumentario que prepara el PP para las próximas semanas consiste en no hablar del paro pronosticado por el Banco de España, del que prácticamente todo el mundo se ha limitado a dar el porcentaje (27,1% de tasa sobre la población activa). Lo grave de esa previsión, sin embargo, no es que supere en casi tres puntos al 24,3% que figura en el cuadro hasta ahora oficial del Gobierno. Lo peor es que si se cumple la previsión del Banco de España, al terminar 2013 se habrán sumado a la lista de parados otros 245.000 trabajadores que habrán perdido su empleo. Esa cifra es precisamente la que se ha convertido en “innombrable” para los altos cargos populares.

Empresas y bancos apoyan la jugada
Pero, ¿en qué basarán Montoro y Álvaro Nadal sus previsiones para dejar la caída del PIB justo en medio de la primera previsión del Gobierno y la nueva del Banco de España? En el Gobierno y en la Oficina Económica de Moncloa están convencidos de que la etapa de vacas flacas terminará después del verano y que las empresas comenzarán a crear empleo en el último trimestre del año. Para ello cuentan con que el crédito a familias y empresas comience a fluir de nuevo tras las vacaciones estivales, porque justo al terminar el primer semestre de 2013 habrá terminado la reconversión bancaria. Las grandes empresas y los grandes bancos han entrado en el juego y mantienen ese mismo mensaje.

Un as en la manga de Montoro
Además, Hacienda, donde manda Cristóbal Montoro, tiene un as en la manga para dar el empujón al argumentario y, si las cosas le salen bien, a la propia realidad económica. El nombre de la criatura es sencillo: se llama 8.600 millones de euros que serán inyectados en la economía a través del pago a proveedores de facturas de comunidades autónomas y ayuntamientos. El Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), ideado para que las autonomías puedan pedir dinero prestado al Estado en lugar de emitir deuda mucho más cara en los mercados, destinará este año 6.000 millones de euros (está dotado con 23.000 millones en total) para pagar facturas. Y a los ayuntamientos llegarán otros 2.600 millones para el mismo fin.

Junta Directiva Nacional
Estos 8.600 millones de euros suponen aproximadamente un 0,8% del PIB y según el departamento de Montoro pueden traducirse en una menor caída de la actividad que deje finalmente el retroceso del PIB en el 1% en lugar del 1,5% que dice el Banco de España. Todo esto formará parte de la arenga que el próximo miércoles, 3 de abril, dirigirá Mariano Rajoy a los más de 300 cargos del PP que se reunirán en la Junta Directiva Nacional. Fuentes próximas al partido consultadas por ELPLURAL.COM señalan que la reunión no estará centrada, como han dicho algunos, en los casos judiciales (Bárcenas y Gürtel) que atenazan al partido, sino en la economía.

Todos a una
Mariano Rajoy quiere, según esas mismas fuentes, poner a todo el partido a trabajar en la difusión del mensaje de que lo peor ya ha pasado, que 2013 es el año del cambio de ciclo, y que para 2014, el primero de dos años electorales, será también el primero de la recuperación. Las encuestas internas que se manejan en la sede central del PP en la madrileña calle de Génova no dan buenas vibraciones para las elecciones al Parlamento Europeo de 2014 y Rajoy quiere dar un giro a la intención de voto utilizando la salida de la crisis como argumento principal.