El expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, habría ganado las elecciones generales del año 2011 dopado. Así lo sospecha la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en un informe fechado a 11 de enero, incorporado recientemente al caso Púnica y al que ha tenido acceso ElPlural.com. Dicho documento refleja el uso de facturas falsas y emitidas antes del periodo electoral, presuntas donaciones ilegales de empresarios e, incluso, el desvío de subvenciones públicas contra el paro por parte del Partido Popular de Madrid.

Pero según publica El Confidencial, la investigación va más allá de los límites madrileños. Hasta ahora, el caso Púnica había salpicado a las generales de 2008 y las autonómicas de 2007 y 2011. No obstante, ahora se abre un nuevo foco: los comicios que llevaron a Rajoy a la Moncloa.

El informe de la UCO detalla tres vías irregulares de financiación que permitieron al PP de Madrid gastar el doble de lo permitido y de lo declarado ante la Cámara de Cuentas. Una de las vías es ya de sobra conocida: donaciones no declaradas y realizadas por empresarios afines al partido. En concreto, se cita una aportación de la empresa OHL, constructora de Javier López Madrid, cifrada en 1.250.000 euros que habrían sido apuntados por el entonces gerente del PP, Beltrán Gutiérrez, como parte de la caja B.

Otra vía consistió, directamente, en el desvío de subvenciones públicas. La fundación afín a Esperanza Aguirre, FUNDESCAM, utilizó ayudas para investigar y analizar los efectos de la crisis en el mercado laboral para pagar diferentes eventos como “cenas de Navidad, gastos de celebración de congresos, actos de Nuevas Generaciones y, sobre todo, gastos relativos a encuestas y sondeos de intención de voto”. En resumen, se destinaron los 109.827 euros destinados a evaluar el desempleo -y de facto combatirlo- para financiar eventos del partido.

Pero existe una tercera vía algo más compleja relacionada con el uso de empresas pantalla. El modus operandi era el siguiente: el PP pagaba facturas a empresas intermediarias que subcontratarían servicios con terceras empresas que se realizarían en periodo electoral.

Concretamente, la información publicada por El Confidencial se centra en la empresa Krea Producciones Artísticas SL, administrada por Francisco Lobatón Martínez; y en Troyano Marketing y Diseño SL.

La legislación prohíbe pagar costes derivados de la campaña electoral con cuentas distintas de las habilitadas específicamente para ello. Pero el PP se buscó las habichuelas. En este caso concreto, papeles hallados en el domicilio del empresario Ricardo Vázquez Segura y en la casa de Beltrán Gutiérrez apuntarían a que hubo facturas pagadas con cuentas ordinarias y no electorales.

En uno de los documentos de Vázquez se mentan dos pagos del PP de Madrid con la siguiente referencia: “EG 2011”. La UCO cree que dicho concepto significa “elecciones generales 2011”.

Así, se abonaron dos facturas de 84.997 euros y 71.390 que corresponderían a trabajos realizados para el PP nacional pero que realizó una tercera empresa que nada tenía que vez con Vázquez: Krea Producciones Artísticas SL.

Junto a esta, la UCO destaca dos facturas emitidas por otra tercera empresa, Troyano Marketing y Diseño SL, cuyo administrados es Óscar Sánchez Moyano. La cuantía total ascendería a 82.069 euros, pero la Guardia Civil destaca los 35.400 euros que se corresponderían con una factura abonada por la esta compañía a otra distinta, Área de Recursos SL, por 250.000 tarjetones publicitarios. Según las pesquisas, la UCO considera que era propaganda electoral de Mariano Rajoy.

En total, el expresidente del Gobierno se habría presentado a las elecciones generales con unos 250.000 euros sin declarar o costeados a través de facturas falsas.