A principios de año Mariano Rajoy echó balones fuera sobre multitud de asuntos durante una entrevista en Antena 3, sin embargo se mojó decididamente por la infanta Cristina para decir que "estoy convencido de que las cosas le irán bien, estoy convencido de su inocencia".

Apoyo a la infanta en plena polémica por la labor de la Fiscalía
A pesar del auto del juez Castro confirmando la imputación de la infanta, seis meses después Rajoy se sigue mostrando igual, como si nada hubiera cambiado. Preguntado en rueda de prensa en Bruselas por si la infanta podrá demostrar su inocencia, el presidente de Gobierno ha insistido: "Ese es mi deseo y mi convicción".

¿Cómo puede pronunciarse así el presidente de Gobierno sobre la inocencia o culpabilidad de alguien y más cuándo la labor de la Fiscalía está siendo tan cuestionada por dedicarse a fiscalizar al juez y no a la imputada? Al menos por prudencia el presidente debería cuidarse en sus expresiones para que nadie piense que sus convicciones y deseos pueden interferir en el proceso.