El expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont ha solicitado al Tribunal Supremo que aparte al juez Pablo Llarena, encargado de investigarlo por presunta desobediencia y malversación. Esto se debe a que el juez se pronunció durante un evento el pasado 11 de septiembre sobre la "constitucionalidad" de una posible amnistía para el 'procés'.

Según el documento, al que Europa Press ha tenido acceso, la defensa del líder independentista ha vuelto a argumentar una falta de imparcialidad por parte del magistrado, una postura que ya había planteado en ocasiones anteriores.

El equipo legal de Puigdemont, liderado por el abogado Gonzalo Boye, ha incluido en su escrito que "varios medios de comunicación" informó sobre las declaraciones del Magistrado Instructor el 11 de septiembre de 2023, en las que afirmó que podría existir un cuestionamiento de constitucionalidad de una futura ley de amnistía.

La defensa subraya que el comentario de Llarena sobre una ley que ni siquiera existe muestra un "posicionamiento previo de alguien que, en su momento, debería pronunciarse sobre ella en caso de ser promulgada". También critica al juez por haber mencionado la necesidad de "verificar si la posible ley (de amnistía) es legítima o justificada".

Puigdemont señala en su escrito que es desconcertante que la función jurisdiccional ahora incluya la evaluación de la legitimidad de las normas emanadas del Poder Legislativo. Asegura que esto revela una falta de imparcialidad por parte del Magistrado-Presidente, quien pone en duda incluso la legitimidad de las normas que los representantes del pueblo puedan llegar a promulgar.

La defensa concluye que ninguno de los planteamientos expresados ​​por Llarena son propios de alguien que debe actuar con imparcialidad. Por lo tanto, el expresidente insiste en que existen razones para la abstención y recusación del instructor, argumentos que ahora presenta ante la Sala de lo Penal para que sea apartado del procedimiento en el Supremo. "Desconocemos desde cuándo la función jurisdiccional pasa por la evaluación de la legitimidad de las normas que emanan del Poder Legislativo pero parece ser que la falta de imparcialidad lleva al Excmo. Magistrado-Presidente a cuestionar, incluso, la legitimidad de las normas que puedan llegar a gestar, o no, los representantes de la soberanía popular", ha apuntado Puigdemont en su escrito.

En este mismo día, Puigdemont presentó un segundo escrito ante el alto tribunal en el que impugna la decisión de Llarena de consultar al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre si el líder independentista había apelado la sentencia que le retiró la inmunidad europarlamentaria, dictada por el Tribunal General de la UE.

No es la primera vez que Puigdemont pide apartar a Llarena

Cabe mencionar que no es la primera vez que Puigdemont solicita apartar a Llarena. En enero, cuando el magistrado decidió procesarlo por desobediencia y malversación, el expresidente catalán pidió al instructor que se retirara del caso y que anulara todas las decisiones tomadas desde que se convirtió en eurodiputado. También solicitó que el caso fuera remitido a un juzgado de instrucción en Barcelona. Puigdemont argumentó en ese momento que Llarena, al procesarlo, había ignorado la jurisprudencia establecida por el propio Tribunal Supremo, creando una situación específica para los eurodiputados independentistas catalanes. También recordaron casos de otros líderes políticos que, a pesar de tener auto de procesamiento, fueron liberados después de ser elegidos como diputados o senadores.

Puigdemont se desmarca de negociaciones de ERC para amnistía: "No me siento concernido por lo que diga o decida pactar"

Asimismo, Puigdemont se ha desmarcado este martes del supuesto intercambio de documentos que ERC ha dicho que mantiene con el PSOE para una ley de amnistía, tras señalar que no se siente "concernido" por los acuerdos que pueda alcanzar el partido de Oriol Junqueras.

"Yo no soy de ERC por tanto no puedo hablar por lo que diga ERC, ni me siento concernido por lo que ERC diga, pacte o decida pactar. Esquerra verá lo que hace Esquerra y nosotros lo que hacemos nosotros", ha asegurado el expresidente catalán en declaraciones en Bruselas donde ha participado en un acto con motivo del día Europeo de las Lenguas.

Así ha despachado Puigdemont las declaraciones de la portavoz de ERC, Raquel Sans, que este lunes daba por "resuelta" la parte política de la ley de amnistía y revelaba que "corren documentos" entre los actores que piden la amnistía, sin concretar entre qué partidos circulan ni qué especifican.

Sans planteó que haya una "máxima coordinación posible" en el tema de la amnistía al entender que "existen diferentes propuestas" y "no tiene sentido que cada uno vaya por libre" tras dar "por descontada" que se pactará esta medida como un paso para iniciar la fase resolutiva del conflicto político entre Cataluña y el resto de España.

Por el momento el Gobierno ha eludido pronunciarse sobre si es cierto, como dice ERC, que hay intercambio de documentos entre distintas partes sobre una ley de amnistía. "Hasta que no termine este trámite, nosotros no comenzaremos las conversaciones formales. Otra cosa es que, como es normal en el Parlamento, los distintos diputados y grupos hablen entre sí", ha argumentado la ministra portavoz del Gobierno en funciones, Isabel Rodríguez.