Una de las noticias de este lunes pasa por la sede de Génova, aunque tiene estrecha vinculación con el Gobierno de Juanma Moreno Bonilla. Según ha publicado ElPlural.com en exclusiva, la Fiscalía Anticorrupción está investigando a Elías Bendodo, número tres de Alberto Núñez Feijóo y ex consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía, por un millar de contratos exprés durante los meses más duros de la pandemia. Una información que, de confirmarse, constituiría todo un escándalo, según ha señalado la portavoz del PSOE y ministra de Educación, Pilar Alegría, quien ha calificado el hecho como “gravísimo” y ha establecido la analogía con la número dos del Partido Popular, Cuca Gamarra; pues la portavoz parlamentaria habría colocado una "red de colocación" en el Gobierno de La Rioja durante la etapa de Pedro Sanz.
“Si finalmente se confirma lo que la Fiscalía está estudiando estaríamos, estaríamos ante un hecho gravísimo”, ha apostillado la portavoz socialista tras la reunión habitual de los lunes del Comité Electoral, celebrado en la madrileña sede de Ferraz. Pilar Alegría ha reaccionado de esta manera, a preguntas de este periódico en rueda de prensa, a las investigaciones que el Ministerio Público está llevando a cabo sobre contratos de personal efectuados por la Junta de Andalucía en los meses más complicados de la pandemia por el coronavirus.
A este respecto, la titular de Educación ha resaltado la cotidianeidad de estos acontecimientos en la casa de los populares. “Llueve sobre mojado”, ha destacado, haciendo referencia a las informaciones que surgieron hace escasas fechas sobre las “colocaciones a dedo” de la actual secretaria general del PP y portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra, en La Rioja. Ahora, el protagonista sería el siguiente en el escalafón de Génova, durante su estancia en la Consejería de Presidencia de la Junta de Andalucía.
El pasado mes de abril, eldiario.es publicó que el nombre de la ahora secretaria general conservadora apareció en numerosos documentos que evidencian su mediación con empresas públicas y privadas a las que se pedía trabajo para simpatizantes del Partido Popular. Según esta investigación, fue la propia Gamarra la que dio orden para que pidieran trabajo al gabinete de la Presidencia del Gobierno de La Rioja, en aquel momento bajo el dominio de Pedro Sanz (1995-2015).
aparece en numerosos documentos que señalan la mediación que tuvo el Gobierno rionajo en esa etapa con las empresas públicas y privadas, a las que se pedía trabajo para simpatizantes del partido. Según los documentos, Gamarra fue la que dio la orden para que pidieran trabajo al gabinete de la presidencia.
Bendodo, en el ojo del huracán
Según ha podido saber este periódico en exclusiva, el Ministerio Público estrecha el cerco sobre el que fuera consejero de Presidencia de la Junta; después de que en marzo de 2020 el propio Elías Bendodo dictaminó la normativa de contratación de personal. Cambios realizados durante los meses más crudos del coronavirus y que ahora ahogan principalmente al número tres de Feijóo y al presidente andaluz, Juanma Moreno Bonilla.
La Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada, sita en Madrid, investiga las citadas contrataciones, lo que implica la existencia de indicios. Según esta información, las diligencias de investigación se abrieron el pasado 6 de mayo de 2022, lo que comporta un triple proceso de ampliación de las pesquisas para determinar si la Junta incurrió o no en un delito penal.
El modelo de contratación permitía se pudieran otorgar plazas interinas en la administración andaluza, tras la publicación de la oferta de empleo en la web de la Junta con la mera presentación de correos electrónicos por parte de los postulantes en un plazo de 24 horas. A ello habría que añadir la titulación y declaración del responsable. Dichas contrataciones superaron las 3.400 plazas en distintas convocatorias, puesto que hubo ofertas en las que ni siquiera se especificó el número de puestos a cubrir.
Dichas contrataciones públicas poco guardaban de relación con la emergencia sanitaria que supuso la pandemia en sus momentos más críticos. Además de que en ellas se incluyesen plazas para médicos, enfermeros y otras especialidades relacionadas con el sector, también se publicaron trabajos en áreas de lo más dispares: arquitectos técnicos (12 plazas) y superiores (14 plazas), ingenieros industriales (26) o de minas (10), gestión financiera (43), administrativos (204), archiveros (2), gestores de patrimonio (10), informáticos (15), ingenieros técnicos agrícola (62), trabajadores sociales (11) o veterinarios (8).
En marzo del pasado 2022, cuando Alberto Núñez Feijóo desembarcó en la planta 7 de Génova, trajo consigo al consejero de Presidencia de Moreno Bonilla. El gallego quería primar Andalucía frente a Madrid como nuevo modelo de gestión para exportar al resto de España. El jefe de la oposición le situó de número tres, dejando a la propia Cuca Gamarra como la segunda de a bordo en el escalafón popular.
“Hechos gravísimos”
En cualquier caso, el escándalo ha estallado a menos de un mes para las elecciones, con la campaña a la vuelta de la esquina y en un Partido Popular que había rebajado sobremanera las expectativas electorales. Acontecimientos que a ojos del principal adversario de los conservadores constituyen “hechos gravísimos”, aunque subrayan que “llueve sobre mojado” en el cuartel general de Génova 13; pues hace escasas semanas trascendió un fenómeno similar en La Rioja, con Gamarra como mediadora, desde el año 95 hasta el 2015.
En Ferraz han subrayado que el asunto “no da pie a la broma”, pero se han permitido ironizar sobre ello. “Entiendo que el PP votase en contra de la reforma laboral porque parece ser que con ser amigo de un dirigente del tenías asegurado un puesto de trabajo”, ha espetado una Pilar Alegría que al mismo tiempo recordaba que Núñez Feijóo abandonaba la comodidad de Galicia para regenerar y limpiar las obstruidas tuberías de Génova.
