El PSOE considera que las amenazas proferidas por un concejal del PP en Novallas (Zaragoza) contra el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, demuestran que la formación que dirige Pablo Casado se ha convertido en un "partido bronco y violento" como consecuencia de la "estrategia seguidista de Vox".

Se trata del concejal Eloy Valero, A través de un post publicado en su página de Facebook, el dirigente ‘popular’ sopesaba asesinar al vicepresidente del Gobierno, - aunque según su propia publicación finalmente se inclinaba por “pegarle un palizón y dejarle vegetal” en lugar de darle “dos tiros”-. 

Tal y como ha informado ElPlural.com pese a la gravedad de sus palabras, los populares han decidido no expulsarle al tiempo que han elogiado su "ejemplaridad" por arrepentirse de sus palabras. En concreto, el presidente del PP Aragón, Luis María Beamonte, se ha limitado a tildar de "tremendamente desafortunadas" las ofensas del concejal. Beamonte ha afirmado que ha hablado con Valero, quien "se ha comprometido a pedir perdón públicamente".  "Me quiero quedar con este gesto bueno", ha dicho el  presidente del PP Aragón tras elogiar que "si alguien se equivoca y tiene la capacidad de rectificar, bienvenido sea (...) Ojalá todos tuvieran esa ejemplaridad cuando esas cosas ocurren". 

Adriana Lastra y José Luis Ábalos 

Ante lo ocurrido, la 'número dos' del PSOE y portavoz en el Congreso, Adriana Lastra, en su perfil en Twitter tras tener conocimiento de las declaraciones del concejal 'popular' Eloy Valero, que opina que lo mejor sería pegarle "un palizón" a Iglesias y dejarle "vegetal" porque pegarle "dos tiros es muy rápido", o que "ojalá" le asesinen "a la vista de su mujer e hijos".

El secretario de Organización del PSOE y ministro de Transportes, José Luis Ábalos, también ha expresado su preocupación en las redes sociales por un vídeo que ya investigan Policía Nacional y Guardia Civil en el que se ve a varios hombres haciendo prácticas de tiro con fotos de los rostros del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el vicepresidente Pablo Iglesias o el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

"Normalizar o contemporizar con el discurso de la ultraderecha no es gratis para la democracia", advierte Ábalos en una alusión indirecta al PP, partido al que no menciona.

Ahora bien, Ábalos señala a continuación que "ningún partido debería permanecer indiferente ante amenazas tan explícitas y siniestras como la que representan y difunden estos indeseables". "La Fiscalía debe actuar", zanja.