El PSOE ha acusado al PP de retroceder y "abandonar" a su portavoz adjunto en el Senado, Antonio Silván, quien esta semana defendió medidas para "paliar, minimizar e incluso suprimir" perfiles anónimos en redes sociales que difunden mensajes de odio. Esto ocurrió después de que se diera cuenta de que muchas de las personas que difundieron bulos racistas y discursos de odio trabajan para medios financiados por administraciones gobernadas por el PP.
"No podía imaginar Silván que su partido lo abandonaría en cuestión de minutos. Alfonso Serrano, número dos de Ayuso, fue el primero en desmarcarse del tema. Borja Sémper, el viernes, fue el último en dejar en evidencia a Silván y cerrar la postura del Partido Popular en este asunto: la misma que sostiene la ultraderecha de Vox y Alvise Pérez. Todo está bien así, no hay nada que cambiar", ha indicado el PSOE en una nota de prensa difundida este sábado.
Silván defendió medidas contra los discursos de odio en internet el miércoles, después de que el fiscal de Sala Coordinador contra los Delitos de Odio y Discriminación, Miguel Ángel Aguilar, se mostrara a favor de prohibir el acceso a redes sociales a quienes cometan delitos de odio "en los casos más graves".
El PSOE afirma que "tiene cierta coherencia" que dejaran a Silván solo: "Es probable que el Partido Popular, con Alberto Núñez Feijóo al frente, se diera cuenta de que muchos de los que, aprovechando el horrible crimen de Mocejón, difundieron bulos racistas en las redes sociales, trabajan para pseudomedios de comunicación que reciben dinero público de administraciones gobernadas por el PP y Vox".
El PSOE argumenta que "exigir mano dura" contra los que difunden odio en redes sociales y mienten sería reconocer que desde sus gobiernos autonómicos y municipales (populares) están financiando parte del problema: "Exigir mano dura contra los que difunden odio en las redes sociales, mintiendo y animando a incendiar las calles, sería reconocer que desde sus gobiernos autonómicos y municipales están financiando parte del problema".
"Por lo tanto, tuvieron que recular y volver a culpar de todo al Gobierno de España. Un nuevo papelón de Borja Sémper a las puertas de la sede de la calle Génova", se indica en el comunicado socialista, en el que se destaca que el PSOE "luchará" contra los bulos y discursos de odio y favorecerá medidas que permitan a la Justicia actuar "contra los que pretenden incendiar las calles y además ganar dinero con ello".
"Es una vergüenza que el Partido Popular se ponga una vez más de perfil cuando hablamos de pseudoperiodistas, agitadores profesionales, fascistas, desocupadores y otros personajes similares. Lo han hecho cada vez que en el Congreso de los Diputados la mayoría de fuerzas políticas han pedido la retirada de la credencial a estos individuos. Nunca condenaron los ataques a sedes y cargos socialistas, que a día de hoy se siguen produciendo, y que muchos de los que han protagonizado los bulos vinculados al crimen de Mocejón también se encargaron de agitar", añaden los socialistas.
"Si el PP defiende a los suyos, que lo haga sin medias tintas. Los socialistas no vamos a ser cómplices jamás, ni por acción ni por omisión, de discursos de odio como los que han llevado a los incidentes de Reino Unido. Casualmente, el modus operandi previo a los actos vandálicos en ese país fue idéntico al que pretendieron poner en marcha en España. Si el Partido Popular quiere seguir en el lado oscuro, será su decisión. Los españoles y la historia los pondrán en su sitio (una vez más)", sentencia el PSOE.
El auge de los bulos racistas en España
En los últimos años, España ha experimentado un preocupante aumento en la difusión de bulos racistas a través de las redes sociales. Este fenómeno ha generado un intenso debate sobre el impacto de la desinformación y el odio en la sociedad, así como sobre las medidas necesarias para combatirlo.
Uno de los casos más recientes y emblemáticos fue el asesinato de un niño de 11 años en Mocejón, Toledo. Tras el trágico suceso, se difundieron numerosos mensajes en redes sociales que aseguraban falsamente que el autor del crimen era de origen magrebí. Estos bulos racistas no solo desinformaron a la población, sino que también fomentaron un clima de odio y xenofobia.
El Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia (OBERAXE) ha reportado un aumento significativo en los casos de discurso de odio racista en redes sociales. En 2023, se notificaron más de 2.600 casos, y en lo que va de 2024, ya se han registrado más de 2.000. La mayoría de estos mensajes de odio están dirigidos a menores migrantes, lo que agrava aún más la situación.
Las plataformas de redes sociales como Facebook, Twitter (ahora X), TikTok, Instagram y YouTube han sido señaladas como los principales canales de difusión de estos mensajes. Aunque estas plataformas han tomado medidas para eliminar contenido de odio, la efectividad varía. TikTok, por ejemplo, ha retirado el 77.7% del contenido notificado, mientras que Twitter solo ha eliminado el 31.5%.
El aumento de los bulos racistas ha llevado a la Fiscalía a investigar si la difusión de estos mensajes puede considerarse un delito de incitación al odio. Según el Código Penal español, la incitación al odio está tipificada en el artículo 510, y puede conllevar penas de prisión. Sin embargo, la desinformación en sí misma no está penalizada, lo que complica la lucha contra estos bulos.