El Partido Regionalista de Cantabria ha provocado un seismo político ante la inminente investidura de Pedro Sánchez programada para los próximos días 4, 5 y 7 de enero. 

El acuerdo del PSOE con Esquerra Republicana de Cataluña ha provocado que la Ejecutiva del Partido Regionalista de Cantabria (PRC) haya acordado por unanimidad votar en contra de la investidura de Sánchez. Este hecho ha supuesto que el PSOE de Cantabria haya advertido a los de Revilla de que si no "rectifica" su 'no' a la investidura del líder socialista Pedro Sánchez como presidente "habrá roto el pacto de Gobierno" suscrito entre ambos partidos en la Comunidad. 

En contestación a los socialistas, los regionalistas señalan que no dan por "roto" el pacto en la comunidad autónoma ni creen que éste se tenga que "poner en riesgo". Además, alegan que el acuerdo en la región no está "condicionado" a apoyar la investidura sino al acuerdo sobre las infraestructuras rubricado con el PSOE nacional y que "se está cumpliendo hasta la fecha". "El pacto en Cantabria depende del acuerdo suscrito entre Mazón y el señor Ábalos, que es lo que posibilitó el acuerdo de gobierno en la comunidad y ese pacto funciona con normalidad, por lo tanto el PRC no rompe el pacto de gobierno en Cantabria y además no va a entrar en ese juego", ha dicho la secretaria de Organización del PRC, Paula Fernández.

A pesar de la posibilidad de romperse en acuerdo en Cantabria, el PRC no cambiará su intención de voto en la investidura. Así lo han manifestado fuentes regionalistas, en declaraciones para ElPlural.com: "Mientras el PSOE mantenga su acuerdo con Esquerra, nosotros votaremos en contra en la investidura".

Aunque el conflicto actual entre ambas formaciones sea evidente, el PRC no quiere la ruptura del pacto en Cantabria. Sin embargo, en caso de que el PSOE decida acabar con él, abren las puertas a un diálogo con el Partido Popular en Cantabria: "Si se rompe el Gobieno regional, nos veríamos obligados a abir diálogo con el Partido Popular. O incluso ir a nuevas elecciones, que ganaría con amplia mayoría, Miguel Ángel Revilla".

Cabe destacar que en las últimas elecciones, Revilla consiguó el 37,74% de los votos, traducidos en 14 escaños. Para alzarse otra vez como presidente, utilizó la vía del PSOE y sus 7 escaños. De esta manera, Revilla necesita el apoyo del PP, que cuenta con 9 escaños ya que con Ciudadanos (3) no es suficiente debido a que los regionalistas perdieron un escaño tras las elecciones del 26 de mayo después del recuento de votos. 

Por ello, de romperse el acuerdo PRC-PSOE en Cantabria, Revilla tendría dos opciones: gobernar con el PP o ir nuevamente a elecciones. Y los regionalistas no tienen miedo a ninguna de las dos posibilidades.